-Alcalde David Melgoza busca convertirlo en parque natural reconocido a nivel nacional
-Hay nuevas medidas, pero abonarán a la preservación del vaso de agua
Oscar De La Rosa, Tangancícuaro
Nuevamente abrió sus puertas el Parque Nacional Lago de Camécuaro, tras varios meses de estar cerrado al público.
La aplicación de nuevas normatividades permitirá conservar el parque natural, principalmente el vaso de agua, porque ya no estará lleno de azolve o basura con la construcción de un muro de contención que evitará que el lodo, que se origina durante lluvias, se vaya a ese punto, sumado a los corredores que fueron colocados en las orillas; además, se hizo la remoción de los comerciantes que se encontraban al interior del atractivo natural para concentrarlos en un punto y evitar contaminación.
David Melgoza Montañez, presidente municipal de Tangancícuaro, informó que otra de las acciones que hicieron fue hacer el retiro de 168 árboles de especies invasoras o enfermas que perjudicaban el lago; a cambio, fueron sustituidos por 584 ahuehuetes, fresnos, sauces y otros del bosque de galerías que permitirán generar un beneficio en el espacio.
Aseguró que también harán la sustitución de los 680 comedores de madera que tiene el lugar por otros de polimadera. El argumento es que el primer material tiene una duración de 2 años, mientras que el segundo es de 30 años. Hasta el momento llevan más de 150 espacios reemplazados y se pretende que a la brevedad se termine de concluir con el resto para que la gente tenga espacios cómodos y ecológicos para sentarse.
“Todo comerciante que quiera formar parte de las ventas deberá cumplir con el hecho de que el puesto sea meramente ecológico y no genere contaminación; tendrán que tomar el curso de manejo de alimentos, así como de primeros auxilios y reanimación cardio pulmonar, proximidad social para que comprendan que se debe cuidar al visitante para que lo atiendan bien y no vendan a costos excesivos, que paguen impuestos y así también tendrán beneficios para su economía familiar”, dijo.
Comentó que los visitantes tendrán que observar 2 videos, de 3 minutos de duración aproximadamente, para cuidar el parque y generación de valores. Ya no podrán ingerir bebidas embriagantes; si se hace uso de los asadores las brasas ya no podrán tirarse al pie de los árboles y también habrá mayor cuidado para la zona de campamentos que estarán observados por la policía turística.
Otro de los puntos en los que se va a trabajar será comprometer a los visitantes a hacer labores de reciclaje de los desperdicios por medio de la aplicación de un programa de educación ambiental que será promovido para que separen los desechos y no se genere una cantidad de basura ni contaminación visual y aérea.
Finalmente agregó que se busca convertir al parque natural en el único reconocido a nivel nacional por su infraestructura y porque realmente se apostará a que esté libre de contaminación o factores que lo puedan poner en riesgo y aseveró que en la parte final del año se pueda tener hecha la inversión contemplada que ronda sobre los 21 millones de pesos, aportación estatal; sin embargo, continuarán las obras.