José Guerra, Jiquilpan
Pese a que el problema más fuerte que enfrentan los taxistas en Jiquilpan es la invasión de taxis de municipios como Villamar, Quitupan y Sahuayo, no es posible hacer un frente común para buscar la solución debido a las pugnas existentes entre las distintas agrupaciones de este municipio.
Lo anterior fue señalado por Santiago Reyes Silva, presidente del Sitio 21 de Mayo quien señaló que resulta complicado hacer un frente común para frenar esta invasión sobre todo por las diferencias existentes incluso al interior de los núcleos transportistas.
Destacó que incluso este gremio guarda diferencias con el Sitio Zaragoza de esta ciudad toda vez que tras la entrega de seis nuevas concesiones al Zaragoza, esta organización ha pretendido invadir los lugares del 21 de Mayo en la terminal de autobuses.
En lo que hace a la invasión de taxis foráneos Reyes Silva señaló que esto es propiciado de manera directa por los comerciantes de esta ciudad quienes incluso han gestionado ante la autoridad local el establecimiento de cajones de estacionamiento para estas unidades provenientes de otros municipios.
“La cámara de comercio les ha brindado el apoyo para que estos táxis foráneos hagan base en Jiquilpan”.
Señaló que estas unidades no operan como servicio de alquiler sino que realizan servicios de colectivo lo que afecta seriamente la economía de los trabajadores del volante de Jiquilpan ya que, en la modalidad de colectivo los taxis cobran, por ejemplo, 17 pesos por persona a Villamar en tanto que la tarifa por este servicio en la modalidad de alquiler entre 80 y cien pesos.
En este caso concertó el entrevistado dijo que se han tenido ya acercamientos con el edil de Villamar Froylán Zambrano López para que a la agrupación de transportista de Jiquilpan se le permita también hacer base en aquel municipio sin embargo no han recibido una respuesta clara en ese tema.
Destacó que en este caso debería ser el Comité Ejecutivo Municipal de Transporte quien tome cartas en el asunto sin embargo este colegiado no ha realizado todavía una sesión formal de trabajo.