José Guerra/Venustiano Carranza.
Productores de granos de esta región encuentran dificultades tanto para ingresar a los programas de agricultura por contrato como para la comercialización de sus granos con los intermediarios libres, esto de acuerdo a lo señalado por Salvador Rodríguez encargado del orden de la localidad de Cerrito Colorado.
Dijo que el tema se dificulta toda vez que la cédula fiscal, requisito indispensable para establecer estos contratos, no puede tramitarse ya en la ciudad de Sahuayo sino en la ciudad de Guadalajara con la pérdida de tiempo y recursos que esto implica.
Ante ello los productores, al momento de tratar de comercializar sus granos recurren a ejidatarios que ya cuentan con esta cédula para realizar la facturación a nombre de terceros y poder comercializar.
Esto implica que, una vez realizada la venta, los productores tienen que esperar a poder facturar para poder recibir su dinero; debido a los ajustes fiscales, dijo el entrevistado, cada vez es más difícil que los productores que cuentan con este documento accedan a facturar para otros debido a que, evidentemente, al momento de su declaración de impuestos tendrán que reportar ventas por montos y volúmenes mayores a las que realmente hicieron.
El problema es que sin este documento, los campesinos no pueden establecer su contrato de agricultura que asegure un precio base de sus granos y por tanto la comercialización de sus cosechas estará sujeta a los precios que corran en el mercado a la hora de la cosecha lo que regularmente significa pérdidas para los productores primarios.