Oscar De La Rosa, Zamora
Sin la realización de eventos sociales y con las restricciones que se mantienen por COVID-19, se cayó hasta 80 por ciento la venta de vestidos y trajes para fiestas. El sector dedicado a ese tipo de ropa tuvo que desechar por el momento la oportunidad de generar producción y en diversos establecimientos de Zamora venden lo que quedó de producto y por el momento no hay novedades en cuanto al diseño.
Así lo dieron a conocer diversos empresarios del ramo a EL INDEPENDIENTE en un sondeo realizado por diferentes negocios establecidos en la zona centro de la ciudad, en donde manifestaron que la crisis propició que incluso tengan que pagar solo el 30 por ciento del salario a su personal para optimizar recursos.
Indicaron que en algunos casos cerraron sucursales y se quedaron concentrados en un solo punto como matriz y en esos casos desafortunadamente recortaron fuentes de empleo. Se estima que perdieron al menos 30 empleos derivado de esas acciones.
“Hicimos pedidos para diciembre del año pasado y lamentablemente nos quedamos sin la posibilidad de vender la mercancía, porque no hubo fiestas entre bautizos, bodas, primeras comuniones y confirmaciones. De manera reciente se nos quedó todo lo del desfile de primavera y estamos en una situación sumamente compleja por la falta de movimiento económico”, explicaron.
Finalmente agregaron que las pérdidas para el sector rebasan el 60 por ciento en la actualidad y es que el hecho de que no haya festividades es una cadena de perjuicios porque además de no comprarse la ropa, tampoco se llevan accesorios y en servicios adicionales no hay música, salones de fiesta y otros elementos que se ocupan para los distintos festejos.