-A diferencia de otras instituciones similares, es así que en un trienio van bien
-Una equivocación podría propiciar reacciones adversas: fiebre, urticaria e incluso la muerte
Elena Rojas, Zamora
“Por lo menos en los tres años que llevo laborando en el Hospital Regional no se ha realizado una trasfusión de sangre errónea a diferencia de lo que sucede en otros lugares similares y que no es difundido por razones de no alarmar a la población, por tanto no se ha tenido ningún reporte de alguna reacción adversa a trasfusiones.
Indicó lo anterior Dante Humberto Nieves García, jefe del servicio de transfusión sanguínea y puesto de sangrado del Hospital Regional, agregó que las reacciones a un procedimiento erróneo en este sentido pueden ser desde una simple fiebre, una presentación de urticaria, un choque o alguna alteración en el paciente.
Indicó que una transfusión equivocada, es decir que el tipo de sangre no sea compatible con el paciente que la requiere podría ser tan grave que podría generar un desenlace fatal como la muerte.
Comentó “el centro estatal de trasfusión sanguínea maneja la certificación calidad 9000-1 en calidad de sangre. Por ello previo a una transfusión se realiza un estudio de serología y las denominadas pruebas cruzadas de compatibilidad con el paciente. Todo ello para verificar que sea sangre de calidad y certificada como sangre segura”.
Detalló “cuando se extrae la sangre se hace lo que se denomina fraccionamientos, es decir, de una unidad de sangre sacamos lo que es sangre total, plaquetas, suero y todos los derivados, los cuales los maneja el Centro estatal”.
Especificó que a todo ello se le hacen las pruebas de serología para ver que la sangre no tenga ningún riesgo de infección ya sea de VIH, hepatitis, chagas, brucelosis, sífilis, o cualquier otra enfermedad que “en lugar de beneficiar al paciente, lo vayamos a perjudicar. Si todas las pruebas salen ya negativas, de que no hay riesgo de alguna infección, entonces ya se pasa a control y a distribución de los hospitales del estado”.
Agregó “una vez que la sangre llega aquí al hospital y todavía hacemos la prueba de compatibilidad con el paciente. Se checa que la sangre que se va a transfundir al paciente si la pueda recibir y no vaya a presentar ninguna reacción. Si por algún error no fuera compatible, lo primero que hacemos es verificar el grupo sanguíneo del paciente y que efectivamente sea él, porque a lo mejor se pueden llegar a confundir a veces con el nombre del paciente y puede ser que pongan un dato de un paciente por otro. Si hay compatibilidad se procede a la trasfusión, de lo contrario no“.
Dijo “es de conocimiento de todos los médicos que una vez que se hace la transfusión, el paciente debe mantenerse en una vigilancia médica. Previo a la transfusión llevamos un registro de el inicio de la misma: signos vitales, temperatura, estado del paciente; luego hacemos una anotación que es durante la transfusión para ver si el paciente no tiene alguna sintomatología o algún daño que les pueda indicar que puede haber un rechazo a la transfusión y finalmente se hace una nota posterior donde se evalúa las condiciones del paciente para hacer un comparativo de cómo estaba al inicio y al final y ver que no haya ninguna complicación”, finalizó.
Numeraria
1,300 a 1,500 transfusiones de unidades por año estima se realizan en Hospital Regional
1 unidad de sangre equivale a 350 mililitros