-Por lo menos en carnicerías locales; además, insumos para alimento de ganado siguen al alza
Elena Rojas, Zamora.
La cancelación de aranceles (impuestos) para traer (importar) cárnicos de otros países, no impactará el precio del producto, ya que la mayoría (más del 90 por ciento) de las carnicerías locales venden productos de producción nacional y lamentablemente en el país los insumos para engordar un animal si están sumamente caros.
Señaló Miguel López Mora, secretario de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), región Zamora, detalló que la carne de importación es un producto congelado y esa sólo se vende en las tiendas departamentales, “por lo que ahí si debiese hacerse notorio algún descuento en el precio del producto, pero prácticamente muchas veces la tienen más elevada que en los expendios locales y además no es producto del día”.
Admitió, “si hay mercado para la carne de importación, pero para la mayoría de la gente que la consume no significará una medida a su favor dicha cancelación de aranceles”. Actualmente el kilo de carne de bistec oscila entre los 180 y 200 pesos.
“Prácticamente está por encima de lo que viene siendo un salario mínimo (182 pesos), por lo que difícilmente la gente tiene acceso a adquirir un producto cárnico, lo que sin duda repercute en un bajo consumo por parte de las familias y en los bajos ingresos de las familias que se dedican a vender este producto”.
Recordó que hace 5 meses, el kilo de carne rondaba los 160 pesos, por lo que ahora se elevo entre 20 y 40 pesos, no sólo por lo caro que está el alimento para el ganado, también sigue al alza la energía eléctrica, la gasolina que se requiere, tanto para trasladar el producto como para mover la maquinaria que está al interior de las engordas, el equipo para estos expendios, en general todos los insumos están caros”.
“Aunque hayan bajado o quitado los aranceles, todo lo que conlleva en la generación y en la producción de la carne de ganado bovino no ha tenido alguna reducción considerable, seria más importante que bajaran los insumos y servicios de la producción nacional, que quitar los aranceles”.
Finalizó al decir que no fincan esperanzas en que la reducción de aranceles repercuta en la reducción del costo de la carne, “hay factores internos, como los ya citados, que si pudieran provocar disminuya el precio del producto”.