Oscar De La Rosa, Zamora
Al municipio de Zamora le fue colocada la bandera amarilla para la prevención de casos de coronavirus. Estar en ese color implica que los comercios sólo podrán operar al 25 por ciento de su capacidad; no pueden abrir gimnasios, antros y bares; no se recomiendan las reuniones con un aforo de más de 50 personas, conciertos, partidos de futbol y en eventos religiosos la apertura para celebraciones con distanciamiento y aforo reducido.
“Estar en bandera amarilla implicará también el hecho de que las autoridades podrán hacer un monitoreo de casos y defunciones para determinar si se cambia de coloración o se mantienen las mismas restricciones. El pasar a una bandera roja generaría el hecho de que las personas no podrían trabajar de manera común de lunes a domingo; laborarían al 25 por ciento los negocios no esenciales sólo de lunes a jueves y el fin de semana descansarían de manera obligada”, puntualizó Diana Carpio Ríos, titular de la Secretaría de Salud en el Estado, tras una reunión que sostuvo con autoridades de la región y representantes de hospitales y clínicas.
Los datos estadísticos de los municipios cambian a diario; sin embargo, la coloración de las banderas cambiará cada 15 días; para pasar a un color rojo que implica mayores restricciones de tomará en cuenta la incidencia de casos. Los otros colores son el verde y blanco para el caso de quienes tienen menos enfermos de COVID 19.
Aseguró que la bandera amarilla fue colocada en Zamora con el propósito de que la gente respete las medidas de prevención como es el uso de cubrebocas, distanciamiento social y por la letalidad que se consideró al 31 de mayo del año en curso. Hasta el momento el registro de fallecidos en esta localidad es de 3 personas, de acuerdo a las estadísticas presentadas en el portal de Gobierno del Estado para la consulta de información de coronavirus.
Mencionó que de no atenderse a tiempo la situación, para evitar un brote comunitario, existe el riesgo de que se puedan tener afectaciones importantes para el último trimestre del año porque además de los casos de coronavirus tendrían que dar atención a personas con influenza y cuadros respiratorios importantes que pueden saturar la capacidad hospitalaria.
“Enfrentamos un déficit en la actualidad de 3 mil médicos para brindar una atención integral a la población y de allí la importancia de que haya una reeducación entre la población para que tome conciencia y no deje en la indecisión actuar sobre el tema”, concluyó.