-Los dejan en el asilo por primera ocasión y después se olvidan de su responsabilidad
-También se presentan casos donde los dejan después de padecer enfermedades
-Patronato hizo remodelación de espacio para mejorar atención a ancianos
Oscar De La Rosa, Zamora
Sigue vigente la cultura de abandono para con las personas de la tercera edad, debido a que son olvidados y relegados por sus familiares, tras recluirlos en el asilo de ancianos. La causa principal es que ya no se quieren hacer cargo de su responsabilidad y manutención porque representa una carga económica importante para las familias.
“Es una falta de compromiso importante y lamentamos que se presente entre las personas del municipio, porque se deja en la incertidumbre a los ancianos. Es una falta de agradecimiento y una pérdida de valores, para con quienes en su momento fueron las cabezas o pilares de familia”, puntualizó Fidel Martínez Acevedo, presidente del patronato del asilo de ancianos Pedro Rocha Escobar.
Comentó que también se han llegado a presentar casos donde los abandonan después de conocer que padecen alguna enfermedad, principalmente, cuando el anciano requiere de un tratamiento especial para atender sus molestias físicas, ya que requieren de una atención directa para evitar que empeore su estado de salud.
“En esas situaciones hemos limitado el ingreso de las personas de la tercera edad. A nosotros nos dejan un compromiso delicado, porque son ancianos que al tener una fractura en cadera, ya no se pueden parar y con facilidad se llegan a deteriorar físicamente, pero además se quedan en un estado lamentable”, dijo.
Mencionó que la atención debe venir directamente de los familiares y más en esas condiciones de salud porque lamentablemente lo que sucede en relación a los ancianos recae en el trabajo que hacen a través del asilo y no se puede culpar a quienes realmente no tienen una injerencia directa en esos casos.
En ese tenor, dio a conocer que hicieron una remodelación del lugar con el propósito de mejorar la atención a los ancianos. Los trabajos consistieron en la sustitución de coladeras, fijación de pintura y colocación de azulejo en las habitaciones para dejar los cuartos de las personas de la tercera edad en condiciones óptimas.
“Las obras son posibles gracias a que también hay personas de la sociedad civil que han determinado sumarse al esfuerzo que hacemos para trabajar a favor de las personas de la tercera edad porque nos interesa que vivan en condiciones dignas y de calidad”, finalizó.
Numeraria
-34 personas tienen actualmente en el asilo de ancianos