José Guerra, Ciénaga
Ante lo irregular del inicio de temporada de lluvias, labriegos de la región Ciénaga en las modalidades de riego y de temporal han externado preocupación toda vez que al cerrarse el plan de riegos del Módulo de Riego La Palma se está solamente a merced de las lluvias para los cultivos.
Es de destacar que el módulo de riego había anunciado el cese de bombeo del lago de Chapala para fines de riego para el último día del mes de mayo, sin embargo esto ocurrió antes debido a que el líquido estacionado en las baterías de bombeo no alcanzaba ya para abastecer riegos, por lo que se optó por regresar este remanente al vaso lacustre.
Ante esta situación, trabajadores agrícolas de los municipios de Villamar, en los ejidos Cotijarán y Emiliano Zapata, los ejidos Totolán, Sarabia y Jiquilpan han manifestado su preocupación ya que regularmente el bombeo se suspende en cuanto se estabiliza el ciclo de lluvias lo que no ha ocurrido.
“Ya no tenemos agua de bombeo y todavía no se acomodan las lluvias y ya estamos temiendo que esto pudiera fallar, si en dos semanas más no llueve como es debido los que sembramos en seco vamos a tener que esperar a que se remoje la tierra para la resiembra y es el doble de gastos” señaló Herminio Buenrostro uno de los productores quien señaló que en ocasiones el proceso de resiembra resulta incluso más costoso para el productor que el acto de la siembra.
Destacó que actualmente aquellos productores cuyas parcelas de temporal se encuentran cercanas a las parcelas de riego han podido ver que actualmente resulta impensable el tratar de extraer más agua de este embalse ante la notoria desecación que sufre este embalse.
De hecho y de acuerdo a lo señalado por la Comisión Estatal de Aguas de Jalisco el Lago se encuentra al 35.58 por ciento de su capacidad lo que le coloca en la cota de medición 93.09 con un volumen de 2,810.47 millones de metros cúbicos de agua.