-Puntualizan luego de cumplir 35 años en realizarlas en Arboledas
Oscar De La Rosa, Zamora.
Las posadas tradicionales no desaparecerán mientras los jóvenes de las actuales generaciones se involucren en preservar. Es un acto necesario porque de esa manera se evita que se introduzcan en el mundo de las adicciones y en actividades ociosas en tiempos donde hay una crisis a nivel de tejido social.
Así lo consideraron integrantes de la familia Rodríguez Hernández que durante más de 35 años se han dedicado a la organización de posadas navideñas en la colonia Arboledas, con excepción de 2 años en donde los efectos de la pandemia impidieron continuar con la tradición que se ha vuelto a retomar para recuperar ese espacio de convivencia familiar, fe y lleno de valores durante la parte final del año.
Indicaron que no solo se trata de ver a niños y jóvenes felices por la recepción de aguinaldos, quebrar la piñata o compartir otros objetos o comestibles, sino de buscar la forma de que las familias puedan tener un momento de paz en tiempos donde ha sido complicado conseguir ese objetivo debido a la distorsión que hay en la sociedad.
Comentaron que lo rescatable de las posadas tradicionales es el simbolismo que tiene cada acto realizado porque el rezo significa la ofrenda a la Virgen María; el recorrido de los peregrinos, el trayecto que hicieron María y José para encontrar un lugar donde pernoctar; la luz de las velas y luces de pólvora, la luz que significa el Niño Dios para el mundo; los aguinaldos, la caridad que deben tener las personas y la piñata, la ruptura de los pecados capitales de las personas.
“Al final de las actividades, lo importante es rescatar los buenos valores como sociedad, pero el hecho de que los niños no dejen de aprender de este tipo de espacios. En nuestro caso como familia, ha pasado la tradición hasta en 3 generaciones y la intención es que se mantenga por muchos años la actividad”, finalizó.