-Artesanos zamoranos optan por ser revendedores; no es rentable
Elena Rojas, Zamora
“Elaborar huaraches artesanales ya no es redituable, por los altos costos en la materia prima (piel, pegamento) así como el tiempo y el esfuerzo que se invierten para su realización. Por ello muchos artesanos zamoranos dejamos de hacerlo para mejor ser revendedores”, señaló Yareth Taboado, comerciante del producto de conocido negocio ubicado en el centro de la ciudad, con 40 años de tradición.
Más del 90% del producto lo surten de Sahuayo, la capital mundial del huarache artesanal; donde se concentra la pieza más grande de este producto (record guinness) y reconocida a nivel mundial por los estilos creativos y diversos que ofrece, así como la calidad del producto, el cual se exporta a Estados Unidos y Europa entre otros mercados. El resto del producto lo adquieren en Tancitaro y otras ciudades michoacanas.
“Sólo es rentable la elaboración del mismo para los artesanos que ya tienen empresas grandes, quienes venden por mayoreo”. Actualmente en el mercado Hidalgo son 12 comerciantes dedicados a la venta de este producto, mientras que hace 40 años el negocio del entrevistado era el único en su tipo, el crecimiento ha sido lento.
Dijo que el consumo local es favorable, sobre todo en esta época de calor, donde las ventas se incrementan hasta un 40%. Sin embargo, los extranjeros siguen dando más valor al producto, “toda vez que en sus países los consiguen a muy altos costos, en cambio, un huarache artesanal llega a costar de 160 a 350 pesos. Además en otros países los modelos no tienen la misma calidad y son de poca durabilidad. Por ejemplo un huarache chino se rompe o despega: dura menos del 50% que un huarache artesanal. Además estos últimos, son más frescos y cómodos. En cambio, con los de plástico suda el pie y causan hongos”.