-Las historias que sensibilizan tienen mayor impacto, declaró conferencista invitada de UNIVA
Elena Rojas, Zamora
“El periodismo social se encuentra en su mayor apogeo en Latinoamérica; toda vez que las historias que sensibilizan tienen un mayor impacto y penetración en la mente y corazón del ser humano, porque no quedan en simples cifras, sino que se convierten en historias particulares de vida que conmueven”, señaló Paola Albao Delgadillo, especialista en creación multimedia, periodismo social y comunicación digital, de la Universidad de la Sabana, Colombia.
Lo anterior lo expresó durante su ponencia “La animación y el periodismo social” que ofreció en la sala de conferencias de la Universidad del Valle de Atemajac (UNIVA) en su plantel centro, donde abundó que “por ejemplo actualmente en Colombia están llegando muchos venezolanos. Y el periodismo en Venezuela está censurado. Por lo que nos estamos enterando de lo que pasa en ese país gracias al periodismo social, a fuentes que no son tan conocidas, pero que tienen una historia que contar”.
“Desde mi punto de vista, los medios de comunicación que están logrando un mayor éxito no son aquellos que buscan la fama o el reconocimiento, sino que realimente están cumpliendo con la labor del periodismo que es contar historias y sensibilizar a la gente. Ese es el impacto del periodismo social, por eso ha tenido tanto auge en Latinoamérica”, consideró.
Detalló, “el periodismo social busca dar voz a las personas que desean contar historias o problemáticas en zonas vulnerables. El periodismo tiene mucho poder, porque es el medio por el que nos enteramos de lo que pasa en una comunidad. Por tanto, lo que informe un medio repercute en muchas consciencias. La responsabilidad de un periodista es muy grande: tener que contar la verdad, la historia tal cual, aunque sea cruda”.
En ese sentido, indicó que la animación se ha convertido en un instrumento para contar historias de comunidades; de personas que han tenido problemas vinculados a la violencia intrafamiliar y violencia en general, “la animación permite no llegar al amarillismo, sino contar lo que realmente se debe, además a través de esta se puede ocultar el rostro de las personas, hacer que se sientan seguras y puedan tener la apertura de contar sus historias y que se sientan cómodos al compartirlas. La animación ofrece seguridad a la gente”.
Habló de otras herramientas tecnológicas a las que también se debe apostar para lograr un periodismo social exitoso, “en multimedia existen varios recursos que nos favorecen para contar historias como motion graphics, que contiene imágenes que simulan”.
“Es como una infografía, pero con ciertos movimientos, lo que ayuda a que no se dé la imagen real, sino que se vaya contando que es lo que está pasando y se utilizan muchas fotografías, pero en estas se ocultan los rostros o se distorsionan”, describió.
Sugirió que los periódicos de lugares pequeños deben apuntar a eso, “y es que en las localidades es donde más situaciones vulnerables se viven. Tenemos que contar esas historias. En Michoacán se cuenta con muchas comunidades vulnerables que requieren eco y que se les dé voz”, finalizó.
Numeraria
2 herramientas tecnológicas que permiten un periodismo social de vanguardia: la animación y motion graphics.