Oscar De La Rosa, Tangancícuaro
Derivado de la contingencia sanitaria ocasionada por el COVID 19 los habitantes de Patamban padecerán las consecuencias de la cancelación de la fiesta de Cristo Rey, contemplada para el último domingo de octubre. Autoridades locales y sanitarias decidieron suspender cualquier actividad asociada al respecto para evitar cualquier riesgo de contagio de la enfermedad.
Uno de los sectores más perjudicados por la pandemia es el de los artesanos, que además de sufrir una reducción importante de ingresos a partir del inicio de la contingencia, hoy solo dependen de compras esporádicas de productos como tasas, vasos, platos, charolas y otros recipientes de cerámica.
“Será un año totalmente atípico, porque sin visitantes a la comunidad no hay producción. De lo único que dependemos es de compras de mayoreo, efectuadas por los diferentes niveles de gobierno. De aquí depende el trabajo de varias familias y lamentamos esta condición”, puntualizó.
Por su parte, familias dedicadas a la elaboración de tapetes, lamentaron que este año no puedan tener colorido las calles porque fueron prohibidas las medidas por las autoridades competentes y dijeron que ni siquiera habrá oportunidad de poner adornos sobre las viviendas, sumado a que se cancelaron todas las festividades religiosas de la parroquia de San Francisco que está en la comunidad.
“Quienes venden comida, flores y cerveza, serán los más afectados porque es un día único para la concentración de personas, que de por si ya no vienen el domingo, a partir de la pandemia. Será un día triste y diferente, pero también debemos ser responsables en el cuidado de nuestra salud”, agregaron.