-No hay vocación de participación en jóvenes por seguir llamado de Dios
-Apenas hay 300 presbíteros para casi 2 millones de católicos en la Diócesis
-Tiempos actuales y falta de valores en familias son causas principales
Oscar De La Rosa, Zamora
Las 138 parroquias establecidas en la Diócesis de Zamora comienzan a verse rebasadas por la falta de nuevos sacerdotes. No hay vocación de participación en los jóvenes para seguir el llamado de Dios a la vida del presbiterio y así poder atender las necesidades espirituales de miles de católicos que hay en esta región.
“Es una crisis de participación y no vocacional, porque si creemos en lo segundo sería aceptar que Dios ha perdido poder de convocatoria entre la juventud y no es así. Hace falta que en las familias se puedan cultivar buenos valores ante tiempos actuales en los que se ha perdido temor por la figura del creador”, puntualizó Jaime Calderón Calderón, obispo auxiliar de Zamora.
Comentó que actualmente hay 300 presbíteros para un millón 800 mil católicos que hay en la Diócesis de Zamora en donde hay 138 parroquias. El promedio es de apenas uno para cada 10 mil feligreses, lo cual vuelve más complicado el trabajo pastoral de los sacerdotes.
“Recordemos que en cada parroquia se atienden varios puntos de reunión de los católicos, además de varios templos o capillas y si es necesario tener que ir a comunidades hay que hacerlo. Por ello a cada párroco buscamos dotarlos de un vicario con el que pueden reforzar su trabajo”, explicó.
Mencionó que cada uno de los sacerdotes que están en funciones ha sido instruido para que no dejen de insistir en las vocaciones sacerdotales en cada una de sus parroquias, para lo cual hacen un trabajo responsable no solo con jóvenes, sino también con los padres de familia para que no se cierren a esa posibilidad.
“La tarea que cada uno debe realizar en su hogar consiste en 3 pasos que son la oración, la promoción y el acompañamiento, porque solo de esa manera se puede hacer germinar una semilla sólida y que no sea endeble a las tentaciones de los tiempos actuales”, dijo.
Dijo finalmente que en el seminario no cesarán en la intención de preparar a los jóvenes de una manera consciente para que lleguen al sacerdocio fortalecido y con la mira puesta en completar la tarea que Dios quiere en esta Diócesis.
Numeraria
2 a 3 seminaristas en promedio se ordenan como sacerdotes anualmente