-En nuestros días siguen predominando tabús y prejuicios del tema
-Importante instruir a niñas y adolescentes a vivir plenamente este proceso con mayor libertad, fortaleza y seguridad
Elena Rojas, Zamora
“La menstruación no debe verse como un proceso vergonzoso. Lamentablemente en la actualidad sigue viéndose con muchos tabús y prejuicios, problemas ancestrales que hoy en día los seguimos arrastrando”, lamentó Karla González Díaz, integrante del colectivo cultura libre (Coculi).
Indicó que es Importante instruir a niñas y adolescentes a vivir plenamente este proceso, con mayor libertad, fortaleza y seguridad, por ello anunció que a la brevedad el colectivo coculi, llevará a las escuelas primarias y secundarias de la región un taller sobre menstruación para que tangan una visión más positiva de este proceso y la dejen de ver como un ciclo vergonzoso.
Dijo, “anteriormente a las mujeres que estaban menstruando no se les permitía entrar a las iglesias, se les consideraba impuras. Incluso había otras culturas donde alejaban a las féminas de la comunidad, mientras estuvieran menstruando, quienes se concentraban en la llamada “Carpa Roja”.
“Esta acción discriminatoria, trajo algo positivo: se generó conocimiento entre las mujeres. De ahí nació la ginecología autogestora, es decir, el autoconocimiento del cuerpo y nosotras mismas saber qué hacer y cómo atendernos”, describió.
“Porque a veces vamos al ginecólogo para tratar infecciones que nosotras mismas podemos atender, pero si no sabemos cómo, acudimos al doctor y este de inmediato nos receta pastillas con altas concentraciones de químicos, cuando a lo mejor esa infección podemos curarla con un té o con un baño de asiento”, citó.
Agregó, “por tanto, ese alejamiento de la carpa roja fue positivo porque generó información y educación entre mujeres, pero se ha mantenido de manera oculta debido a los tabús que han rodeado a la menstruación, los que han superado ese aspecto positivo”.
“Y es que a las mujeres cuando están menstruando se les considera sucias, se nos limita a tener ciertas actividades físicas o incluso hay un discurso muy particular cuando las niñas empiezan a menstruar que es trasmitido por las mismas mamás: que les dicen: a partir de este momento ya te vas a tener que cuidar más, ya no vas a jugar a ciertas cosas”, puntualizó.
“Lo anterior afecta sin duda el estado emocional de las niñas, ya que se les empieza a limitar, a través de un proceso que no debería ser limitante, sino al contrario, abrirles las puertas a un montón de información y de conocimiento sobre su cuerpo y emociones y más en un proceso tan importante que te afecta física y emocionalmente”, subrayó.
“Hay un sin fin de tabús que rodean a la menstruación, que incluso es sinónimo de burla en las escuelas. Hay muchos niños que pueden llegar a ofender a sus compañeras o a burlarse de ellas cuando se llegan a enterar de que están menstruando”, indicó.
“¿Quién nos ha enseñado a verlo de una manera tan vergonzosa? Hay bastante desinformación al respecto. No deberíamos de escandalizarnos por un proceso que nos ocurre a todas las mujeres, quienes somos mayoría en el mundo. ¿Por qué un proceso que a todas nos pasa lo mantenemos en el tabú, en la vergüenza y escondido?”, finalizó.
Numeraria
4 profesionistas conforman el Colectivo