-Contrataciones escasas o nulas y cuando hay, son para recordar a difuntos
Elena Rojas, Zamora
Los mariachis también están de luto, al igual que muchos otros gremios, también han perdido a músicos y familiares de estos en la batalla contra el COVID-19. Tan sólo en Zamora han fallecido 10 músicos (mayores de edad) que provenían de rancherías cercanas a trabajar en las 7 agrupaciones de esta ciudad: “Los Alacranes”, “Los Monarcas”, Nuevo Azteca”, “Tequila”, “El Imperial”, “Juvenil Galleros” y “Halcones de Mi Tierra”.
Así lo informó Juan Orozco Díaz, representante del Mariachi “Nuevo Azteca”, ayer en el día internacional del Mariachi, “en este momento las grandes capitales del Mariachi: Garibaldi, en la ciudad de México y la plaza de Guadalajara están prácticamente desoladas”.
Y no se diga aquí en Zamora, agregó, en el barrio de gran tradición de los mariachis, que comprende las calles Amado Nervo, Galeana y Verduzco, los locales de estas agrupaciones permanecen cerrados, son escasos los que mantienen abierto, con la esperanza de que alguien requiera sus servicios.
“Lamentablemente no hay trabajo, inclusive hay colegas que, ante la falta de fiestas, se han puesto a tocar en la calle y sólo reciben dádivas. Hasta ese grado ha llegado la situación. Desafortunadamente han cerrado muchos salones de eventos y hay restricciones para hacer fiestas, por lo que se han disminuido el trabajo hasta en un 60%”, destacó.
Relató que previo a la pandemia daban 10 servicios por semana, “ahora si acaso son 4 a la semana, sobre todo en las rancherías de los alrededores, y la mayoría de estos no son para fiestas, sino para recordar a los que ya se han ido”.
Consideró que el mariachi es la música del arte de la alegría para hacer lucir las fiestas, sin embargo, con esta situación, “nuestra actividad se torna triste y melancólica, porque nos contratan para recordar a los difuntos, pero no durante el velatorio o en el panteón, sino en algún domicilio, ya después de que aconteció el funeral. Los precios van de 2 mil 800 a 3 mil pesos por 8 canciones durante media hora”.
“Amor Eterno”, “Te vas ángel mío”, “Dichoso el árbol” y “las cuatro velas”, son las canciones que más solicitadas para recordar al muerto; en contraste, “cuando nos llegan a contratar para una fiesta, lo que más nos piden son sones jaliscienses: el de “la Negra”, “la mariquita”, “el tirador”; al igual que canciones rancheras”.
Mencionó que en estos últimos casos cobran 3 mil 300 pesos durante 2 horas, “se trata de fiestas pequeñas con poca gente. Mientras que previo a la pandemia por 5 horas cobrábamos 3 mil 600, debemos cobrar un precio justo porque cada mariachi está conformado por 9 elementos”.
Finalmente dijo que la música de mariachi no va a morir, “estamos ahorita en un receso, por la situación de pandemia, muchos están con miedo o en duelo por haber perdido a un ser querido, pero la música ranchera seguirá teniendo gran auge”.