-Es una enfermedad estigmatizada, población no debe alarmarse ya difícilmente se contagia
Elena Rojas, Zamora
Luego de escasos días de que resurgieran los primeros casos de lepra en el país y concretamente en Michoacán, Gonzalo Peña González, médico dermatólogo, llamó a la población a no alarmarse por esta enfermedad, aseguró “no es tan mala como la pintan” ya que esta difícilmente se contagia y afortunadamente en el sector salud se cuenta con medicamento para curarla.
Subrayó, “la lepra no es tan violenta como se cree, es una enfermedad infecciosa muy difícil de adquirir. La bacteria mycobacterium Leprae tiene obligadamente que vivir dentro de la célula. Por tanto, si alguien está hablando y avienta la saliva, sale y se muere inmediatamente. Por tanto, es un bicho intracelular obligado, es decir, tiene que vivir dentro de la célula”.
“Por lo que no es fácil contraerla, se necesita tener mucha cantidad de bacterias para que se pueda respirar o adquirir y desarrollar. Además, todas las personas contamos con el factor “N” de resistencia natural, por lo que difícilmente nos la pueden contagiar”, citó.
Aseguró que actualmente no es una enfermedad alarmante, ya que quien la padece no pone en riesgo su vida, como hace años, “los casos repugnantes que veíamos en las películas o revistas, ya no se ven en la actualidad”.
Comentó que es una enfermedad muy estigmatizada debido a la ignorancia, “muchos pacientes ni siquiera quieren comunicarlo a su familia o en su trabajo, por miedo al rechazo o a que los corran, cuando no debe ser así, como sociedad no debemos tener miedo a la enfermedad”.
Explicó “hay dos grandes grupos de lepra: la tubercúloide y la lepromatosa. La más violenta es esta última, que ocasionaba desfiguros de la cara y deformación de los dedos. Esos pacientes se pueden curar perfectamente bien con tratamientos que duran un par de años”.
En cambio, la lepra tuberculoide es más benévola, sólo ocasiona zonas anestésicas (falta de sensibilidad) y se cura con tratamientos que duran 6 meses, por fortuna el sector salud los provee, “tengo más de 8 años en Zamora y en ese tiempo en la ciudad y la región no he visto un solo caso de lepra, cuando hace más de 25 años si eran frecuentes”.
Puntualizó que cuando existe o se conoce de algún caso por médico particular, este debe canalizarlo al Instituto Dermatológico de Jalisco, donde se encuentra la Asociación Jalisciense contra la lepra.
Son ellos, finalizó, los que garantizan el tratamiento. Además, se debe notificar a la jurisdicción de Zamora, “para que realice visitas domiciliarias a los contactos del enfermo con la intención de descartar, más casos”.