Oscar De La Rosa, Zamora
Las festividades navideñas se han desvirtuado debido a que los jóvenes celebran la navidad fuera de su núcleo familiar, debido a la pérdida de valores y que algunas tradiciones como los intercambios, el abrazo, la cena o incluso las posadas (en su representación religiosa) se han quedado atrás como producto del consumismo.
“En los últimos años se ha perdido el gusto por los momentos familiares y hoy los jóvenes tienen otro tipo de intereses para la navidad como es el hecho de ponerse ebrios, salirse con los amigos y olvidarse del compromiso familiar que debería prevalecer. Muchos no saben incluso cuál es el sentido de los festejos”, así lo consideraron jóvenes zamoranos abordados por EL INDEPENDIENTE TV para conocer como es que celebran la navidad.
Indicaron que la falta de ese tipo de momentos también es producto de que en las familias se ha dejado de lado la posibilidad de fortalecer el núcleo y no continuar con las tradiciones y costumbres de antaño, en donde además de la música y anécdotas también era el momento para fortalecer los lazos familiares.
Por su parte, migrantes de la región de Zamora dijeron que todavía existe la confianza en venir a Michoacán para celebrar las fiestas navideñas y es por ello que se han dispuesto a llevar a cabo la cena familiar con un toque de comida mexicana, entre pozole, tamales, una buena taquiza y el ponche que no puede faltar acompañado del tequila o cualquier otro vino para celebrar la noche buena.
“Es muy diferente lo que se vive en México a Estados Unidos, porque aquí las personas están acostumbradas a la fiesta; el mexicano es más divertido y argüendero. Los estadounidenses son fríos y no acostumbran a hacer fuerte el festejo y a nosotros no nos queda más que estar encerrados en casa para esas fechas cuando se debería celebrar”, dijeron.
Finalmente agregaron sentirse arropados y protegidos en Zamora con las festividades que se han organizado en la región y consideraron que es importante que no se pierdan las costumbres de continuar con las reuniones familiares, pese a que existan cambios en las nuevas generaciones que deben ser atraídas por los buenos valores para mantener vivos los festejos.