No habrá berrinches
José Luis Ceja Guerra
Parece que el PRI de Jiquilpan ha tomado una de las decisiones más importantes en los últimos años; ir por una candidatura de unidad sin importar quién la encabece. Y es que todo indica que el pacto fundamental entre los aspirantes es que no habrá berrinches, el que ganó, ganó y los demás a sumarse.
Evidentemente el cumplimiento de este acuerdo dependerá totalmente de la madures política de los actores centrales y del control que tengan de sus grupos para evitar una nueva desbandada al PAN.
Por cierto que…
En el PAN la situación es insostenible debido a la necedad de Marco Valencia por hacerse de la candidatura por Jiquilpan cuando todo indica que al menos el grupo que encabeza Luisa María Calderón no apoyará a Valencia en su intento. Dependerá entonces de sus propios recursos el obtener primero la candidatura y después la alcaldía por un partido al que su equipo se ha empeñado en destruir.
Ya entrados en gastos y al grito de que “el que se aleja Dios lo deja” los nombres por el priismo regional para ocupar el lugar que dejará vacante Salvador Romero en el Congreso de la Unión comienzan a brotar cual silvestres florecillas en primavera; de entrada están apuntandos Froylán Zambrano, alcalde de Villamar; Marcos Villaseñor, hermano de la actual legisladora federal Blanca Villaseñor; Osvaldo Fernández ex presidente estatal del PRI y otros que también están en la lista aunque suena fuerte el rumor que el que lleva mano en esta carrera es Gerónimo Color, gerente estatal de Liconsa.
Por la diputación local los tricolores pusieron en la lista a los ex alcaldes Juan Manuel Figueroa Ceja, Erick Chávez y Rafael Ramírez de Jiquilpan, Marcos Castellanos y Sahuayo, respectivamente además del ex diputado local Gustavo Orozco y al que fuera su suplente Juan Manuel Hemman y Norma Contreras además e Patricia Cornejo, nombres con los que pretenden abarcar el espectro socio-político existente.
Huecos… con C.
Lo cierto es que los partidos políticos deberán estar atentos al concierto nacional y estatal. En fechas recientes el panismo michoacano se sacudió con la renunciad e Alfonso Martínez sin embargo ello no modificó la geografía de los cotos de poder en los municipios lo que sí ocurrió con la renuncia de Cuauhtémoc Cárdenas al PRD y las renuncias presentadas después por quienes se consideraban “de su grupo” en Michoacán y en los municipios declarados abiertamente como ‘cardenistas’, Jiquilpan, por ejemplo, donde por un mero acto de congruencia esperaríamos la renuncia de Alberto Novoa (primer alcalde perredista de este municipio) quien a nombre de Cuauhtémoc Cárdenas ha tenido intervenido y amagado al comité municipal perredista por lustros.
Forma y fondo…
No es fortuito que en estos momentos los partidos políticos intenten retomar el papel de representantes de la ciudadanía y que ahora denuncien a voz en cuello aquellas cosas que callaron los últimos 35 meses; cuestiones de estrategia, dirán los partidos, oportunismo, mezquindad y descaro responderá el ciudadano