Elena Rojas, Zamora
La Cámara Nacional de Comercio (CANACO) Zamora vive en este momento constantes crisis que agudizaron la problemática existente desde mediados de año. Y es que sus dirigentes se encuentran divididos por supuestas irregularidades al interior de este organismo empresarial.
Mientras un grupo encabezado por José Eduardo García Altamirano, quien se ostenta ahora como secretario de CANACO, culpa a Pablo César Negrete Pulido, dirigente supuestamente removido, por falsificar un acta de asamblea y ostentarse en ella como presidente del organismo, lo cual dicen “es un delito grave”.
En así que ayer José Eduardo García Altamirano convocó a una rueda de prensa en un local de esta ciudad, no en la sede y sin la presencia del considerado nuevo presidente, donde explicó, “una acta de Asamblea se debe hacer al principio de año para elegir presidente, consejeros, secretarios y la mesa directiva completa”.
“Ya teníamos, desde el mes de Enero, la original protocolizada en base a la ley y a los estatutos de cámara. Y posteriormente, en julio, Negrete Pulido hizo otra donde se adjudica poderes externos que nunca se dieron y nombra a otras personas con otros cargos. Se cree la autoridad de la cámara, siendo que no es así”, sostuvo.
Indicó, “esta acta apócrifa la presenta en diferentes asociaciones. Además de que quiso sorprender a varios miembros de la cámara para que firmaran dicha acta. Posteriormente, hicimos una junta de consejo directivo donde 10 de los 12 consejeros están de acuerdo a la remoción del presidente. Se le hace llegar la carta y en la séptima sesión ordinaria con la presencia de un notario se destituye”.
Comentó que en esta sesión del consejo directivo donde se destituyo al presidente se acordó una asamblea extraordinaria que se llevó a cabo el 13 de octubre en base a los estatutos en la que se ratifica la remoción de Negrete así como de su mesa directiva, donde solo estuvieron presentes 8 de los 12 consejeros “también detectamos malos manejos. Con dinero de los comerciantes Negrete hacía viajes a Estados Unidos y China para supuestos acuerdos con esos países, lo cual nos parece un despilfarro de dinero”.
Señaló que sus asambleas se hicieron en conocido hotel del centro de la ciudad porque supuestamente el grupo opositor no les permitió el acceso a las instalaciones de CANACO, “ellos mismos estaban corrompiendo los estatutos. Estos establecen que cualquier socio puede tener acceso a las instalaciones”.
Por lo anterior dijo que el Consejo confirmo la destitución y acordaron la designación de un nuevo presidente y por lo tanto otra mesa directiva. Quedó al frente Rodrigo Solís Gutiérrez, quien no estuvo presente en la conferencia de prensa por “cuestiones laborales”.
Admitieron que los problemas internos del organismo empresarial afectan el comercio local y regional, “las oficinas de la calle Colón están cerradas, ya que no podemos mantenerlas abiertas, hemos tenido amenazas, nos han querido sacar a la fuerza. No nos dejan trabajar, y peor aún ya viene el Buen fin”.
García Altamirano puntualizó que en este momento un despacho jurídico respalda a su padre García Velázquez en el proceso que enfrenta, “Negrete habla de un desvío de recursos del INADEM. Es muy difícil desviar un recurso federal”.
Por su parte Miguel Agustín Peña Gil, quien se ostenta como consejero y primer vicepresidente, subrayó que todo lo que se saca de la cámara tiene que ir aprobado y firmado por dos personas, “es un órgano colegiado. No hay nadie que tenga todo el poder. Solo hemos sacado estos muebles para poder hacer esta rueda de prensa”.
Negaron que el pasado sábado violentaran la chapa para ingresar a la fuerza a las instalaciones de CANACO, aunque hoy en día hay nueva chapa en la entrada de oficinas en la calle Colón, según se observó.
Finalmente lamentaron la situación que enfrenta CANACO, “lo único que está ocasionando este problema es que la gente y agremiados desconfíen de nosotros”.
Numeraria
1 sesión de consejo por mes, marcan los estatutos
12 consejeros elegidos por los socios afiliados