Ma. Guadalupe Covarrubias, Zamora
Noche de luces, de música, de baile, de espectáculo, de pirotecnia, de calor deportivo fue la que ayer se vivió en el estadio de la unidad deportiva El Chamizal, escenario que cobijó la fiesta de inauguración de la VI Olimpiada Municipal 2013, que los zamoranos en glamoroso gesto lanzaron el mensaje de paz y armonía a los cuatro vientos, de que con el deporte todo es posible.
Y tan lo es que las tribunas del pequeño estadio estuvieron colmadas de gente de bien que, con sus porras y vivas, dio, aún más calor al evento, que inició a las 19:30 horas, con el saludo de la batucada, que abrió boca en el respetable, con sus ritmos cariocas de tambores y silbatos.
Posteriormente inició el acto formal, con el desfile de contingentes, a la cabeza, un grupo numeroso de la Tercera Edad, marchó sobre el óvala del pequeño estadio, saludando al público y al palco de honor, presidida por la Delegada de Turismo Rosy Álvarez Vda. De Márquez, Jaime Escobar regidor de Juventud, Deportes y Capacidades Especiales, Juan Carlos Velázquez, presidente de Forjadores de Esperanza y Jesús Delgado, de Atención Ciudadana.
Continuaron los pequeños con capacidades especiales, los basquetbolistas, beisbolistas, futbolistas, de natación, arte Marcialistas, trebejistas, ciclistas, de lucha libre, boxeadores, frontenistas, voleibolistas, gimnasios de fitness, gimnasios de fisicoculturistas, hasta completar 27 contingentes, éstos fueron instalados en la tribuna poniente del estadio.
El estruendo de motociclistas, anunció la llegada del fuego olímpico trasladado desde la plaza principal, en su entrada al óvalo, los de Fila India, dieron la vuelta olímpica, para enseguida abandonar el óvalo y dar paso a la entrada de las banderas, que chiquitines del Instituto Independencia hicieron ondear.
Luces multicolores, pirotécnicos y reflectores iluminaron, el escenario, en paso a la bandera blanca con los cinco aros simbólicos, en ese momento se apagaron las luces, fue la solemnidad, la que selló el evento, la que hizo vibrar a los asistentes y más cuando por la puerta de acceso apareció la antorcha, que en manos del ciclista José Teodoro Ascencio, recorrió un tramo para luego entregarla al velocistaIsaac, éste al ciclista Rogelio Avalos, para dejarla en manos de otro velocista quien se encargó de encender el pebetero que arderá durante las dos semanas de la Olimpiada Municipal.
Ya en el centro la monumental bandera blanca con los cinco aros simbólicos, vino la declaratoria, inaugural a cargo del regidor Jaime Escobar y la toma de protesta a los deportistas la hizo el coordinador municipal de deportes Julio Ramírez Rosales. Posteriormente para cerrar el evento las notas musicales del mariachi Real de América deleitó a los asistentes. Participaron además el Salón 21 de Baile, la asociación de charros con Nicolás Flores a la cabeza. El evento culminó con una serie de pirotecnia.