-70 se encuentran retirados de servicio o lo prestan de manera parcial por condición física
-Apuestan por reforzar vocaciones sacerdotales en jóvenes y monaguillos
-Espíritu de la Iglesia Católica se mantiene firme, pese a la condición
Oscar De La Rosa, Zamora
Los sacerdotes de la Diócesis de Zamora han envejecido. Son 70 los pastores que por alguna razón se han retirado del servicio activo o prestan atención a la comunidad católica de manera parcial. El motivo es su avanzado estado físico y otros presentan enfermedades de consideración que los han marginado de continuar en su labor de evangelización.
Actualmente en la diócesis de Zamora hay un total de 300 sacerdotes distribuidos en 140 parroquias. Su estado para prestar los servicios religiosos a la comunidad es óptimo y con el ánimo de hacer crecer la evangelización en muchas personas que acuden a participar en cada una de las actividades correspondientes.
“Las parroquias se encuentran debidamente cubiertas y por lo tanto no tenemos esa dificultad, por el momento. Lo que sí es un hecho es que necesitamos reforzar nuestro número de sacerdotes a través de las vocaciones en jóvenes que permitan renovar y darle mayor fuerza a cada una de las actividades pastorales en esta región”, puntualizó José Antonio Oseguera Barragán, padre secretario canciller de la Diócesis de Zamora.
Aseguró que trabajarán con los jóvenes a través de los diferentes cursos de inducción que se ofrecen en diferentes parroquias para que el futuro seminarista vaya plenamente convencido de lo que es el servicio a Dios y su comunidad de católicos en donde es necesario llevar la palabra que permita iniciar o renovar la fe en cada feligrés.
“En los monaguillos (niños que ayudan en las labores de misa), hemos procurado inducirlos para que en un futuro se decidan a continuar con el camino que Dios ha puesto como opción en su futuro. De ahí esperamos que se puedan generar más conciencias convencidas de seguir a Cristo y ayudarlo a fortalecer y mantener unida a su comunidad católica”, dijo.
Mencionó que el espíritu de la iglesia católica se mantiene firme, pese a las condiciones físicas de algunos sacerdotes que durante muchos años, convencidos de su ministerio sacerdotal, dieron su vida para trabajar en lo que Dios busca de cada uno de ellos.
Finalizó al decir que es importante el hecho de que las familias católicas no dejen de pedir por las vocaciones sacerdotales, sumado al trabajo que realizarán en las distintas parroquias para identificar a quienes pueden seguir al creador en el camino de la fe.
Numeraria
-300 sacerdotes en 140 parroquias hay en la Diócesis de Zamora
