M. Guadalupe Covarrubias, Zamora
Tigres de Zamora por fin sacó las garras y venció a la novena de El Rodeo 7 carreras por 6, en juego accidentado efectuado en el parque de pelota “Francisco González Ibarra de la unidad deportiva El Chamizal, en lo que fue la apertura de la segunda vuelta del Torneo de Beisbol de Verano; con la victoria los felinos se desagravian con su público que llenó las tribunas del parque.
Juego de volteretas el del pasado domingo entre los zamoranos y los del Rodeo, que iniciaron la primera entrada timbrando dos carreras, que dejó por momentos desorientados a los felinos, sin embargo en el mismo episodio respondieron con la del empate.
Para entonces ya los aficionados en las tribunas avizoraban un interesante duelo de pitcheo entre el local Marcos Sánchez y el visitante Raúl Morales, que sacaron de su repertorio los mejores lanzamientos, recetando “chocolates”, para dejar la segunda y tercera entrada sin hits.
El cuarto inning avivó las emociones, cuando vino la ofensiva de los felinos que con dobles impulsaron corredores, para finalmente dos llegar a la almohadilla y mover la pizarra a favor de los locales. El Rodeo respondió con un imparable que acarreó una carrera, para el 3-2, por cierto carrera accidentada, ya que el cátcher Paul Manzo, cuando el corredor visitante se barrió para tocar la almohadilla, el zamorano le cayó encima de la pierna, por lo que el corredor de Rodeo fue llevado al hospital, donde por fortuna no pasó a mayores, todo quedó en susto.
Para la quinta entrada, Rodeo se fue arriba al conectar un doble que impulsó dos carreras para el 4-3, el juego se tornó interesante, las estrategias de los manejadores, fueron modificadas por Zamora, Pepe Manzo, mandó bateador emergente, para tratar de emparejar la pizarra, tarea que cumplió, el juego estaba empatado 4-4.
Con corredor en primera, Paul Manzo, se puso en la caja de bateo, luego de llevar en la cuenta dos out y tres bolas, en el siguiente lanzamiento conectó de tal forma que envió la pelota tras de la barda para un cuadrangular, que impulsó dos carreras para el 6-4. Las emociones crecían ya que en la parte baja de ese mismo El Rodeo, volvió a timbrar dos carreras para igualar una vez más la pizarra.
El cierre de la novena entrada fue sensacional, pues los felinos batearon una bola por la segunda base, el cuidador de esta almohadilla se interpuso en el camino del parador en corto, que trataba de atraparla, la pelota se fue para un increíble error de los visitantes que les costó, la carrera del gane de los zamoranos para un marcador final de 7 carreras por 6.