-Zamora era líder en el mercado, pero se fue a declive
Elena Rojas, Zamora
No hace mucho tiempo, Zamora era considerada una de las ciudades con mayor potencial comercial para el mercado de los negocios que ofertan vestidos de novias y para todo tipo de eventos sociales (Bautizos, XV años, primeras comuniones y graduaciones), toda vez que en esta localidad se concentran diversos recintos religiosos atractivos para que muchas parejas se unieran en matrimonio.
Sin embargo, hoy en dia este tipo de giros, al igual que otros, se encuentran en el ocaso ante las bajas ventas, por un lado debido a la contingencia sanitaria y por el otro que “bajaron las ganas” de casarse.
Rafael Cortés, Gerente de conocida Boutique, detalló que previo a la pandemia el mercado era favorable, “ya llevamos prácticamente 3 meses sin trabajo, por lo que hemos buscado otras alternativas, nos hemos dedicado a hacer cubre bocas y mosquiteros para sobrevivir”.
“Previo a la contingencia vendíamos alrededor de 50 vestidos para novia y otro tipo de eventos sociales que lográbamos colocar tanto de manera local, como en diversos estados de la República, inclusive en el extranjero Estados Unidos y Bélgica, gracias a nuestra página web. Y ahora, durante esta contingencia, por mes, con trabajos se venden si acaso dos vestidos, los hay desde los más módicos de 3 mil pesos, hasta los más extravagantes y laboriosos de cristalería fina de 60 mil pesos”, resaltó.
Lamentó que hay mucha incertidumbre entre la gente por saber cuando realmente reanudarán los permisos para las fiestas, eventos sociales y misas, “actualmente estas últimas tienen muchas restricciones, prácticamente no quieren invitados, por tanto la gente no quiere invertir en buen vestido para lucir.
Aseguró que esta difícil situación de baja venta no se había visto nunca, “aunque hubo la crisis del 2009 con la devaluación de López Portillo y otras posteriores que parecían crisis severas, ahora son de risa. Lo peor de todo es que esto es el comienzo, “la punta del ice berg” tememos que se va a agravar, tanto en la cuestión económica como en materia de salud”.
Dijo, “si bien es cierto, Zamora tiene mucho potencial comercial, viene gente de otros municipios y estados a hacer sus compras, pero principalmente se surten de productos esenciales y desafortunadamente este giro no es considerado esencial, al estar prohibidas las fiestas, la gente no compra prendas”.
Finalmente señaló que los meses más favorables para su negocio eran mayo, junio y julio por las graduaciones, toda vez que también hacían vestidos para ceremonias. Así como septiembre, octubre, noviembre y diciembre, “esto por los paisanos que venían de E.U a contraer nupcias a esta ciudad, pero lamentablemente las ventas han venido en declive”.