-Necesario regresar a impartir civismo, además de autoestima, dominio propio y pasión por servir al prójimo.
Elena Rojas, Zamora
“El sistema educacional en México es primitivo en todos los sentidos. El tema del emprendedurismo tiene muchas desventajas, estereotipos y estigmas también primitivos y es que las escuelas hacen jefes, no líderes ni mentores”, señaló Daniel Habif, actor, escritor y conferencista.
Así lo expresó en rueda de prensa hace unos días, previo a su ponencia “El fracaso no existe”, que presentó en el teatro Obrero, con una asistencia de más de 400 personas.
Agregó, “la mayoría de los jóvenes salen con muchísima hambre de lo que sea; con una urgencia y una velocidad de poder cumplir con sus necesidades básicas económicas, pero no hay un orden, no hay una disciplina o un enfoque. Hay una falta de visión. Los padres y maestros nos dicen: dedícate a algo que te deje dinero, no a algo que te de paz o gozo”.
Añadió, “estigmas hay cientos, depende mucho de los padres, maestros y escuela, pero sobre todo depende de acercarnos a los jóvenes y darles las opciones fundamentales para que puedan conseguir el éxito en la vida. Por tanto mi propósito número uno es regresar el civismo a las clases en México”.
De igual forma dijo que es importante inculcar a los jóvenes de educación primaria y secundaria el valor de la autoestima, “el 93 por ciento de las adicciones tienen que ver con un tema de baja autoestima, “si regresáramos a enseñarles a los jóvenes tener dominio propio, control, educación cívica, a amar y servir al otro, de otra cosa estaríamos hablando”.
“Si de verdad comenzáramos a cambiar las horas de matemáticas por horas de equilibrio emocional y espiritual, veríamos la cosecha en 10 años, con una sociedad con otro tipo de valores y herramientas emocionales del cableado humano. Si hoy enseñáramos ciencias de la felicidad, tendríamos una educación más apegada a la realidad actual y no primitiva”.
Lamentó que actualmente sólo el 4 por ciento de los jóvenes están estudiando una carrera del cableado humano: psicólogos, psiquiatras, antropólogos, sociólogos, periodistas, etc. El resto de los jóvenes estudian carreras exactas, “por tanto, vamos a tener a un país muy bien preparado, pero miserable. Tenemos gente que tiene tres doctorados y no sabe decir buenas noches”.
“Por lo tanto, tenemos una pata rota en la sociedad, tenemos grandes expectativas, pero nadie está haciendo lo necesario para construirla de adentro hacia afuera. En algunos casos tenemos una casa muy bonita por fuera, pero por dentro esta cuarteada”, concluyó.
Numeraria
93% de adicciones son producto de baja autoestima
4 por ciento de jóvenes mexicanos estudian una carrera del cableado humano
