¿Y la información?
José Luis Ceja Guerra/Ciénega.
Resulta que en diversos municipios d esta región se ha establecido, digamos, la moda de que la información de las dependencias municipales que en teoría debiera ser pública, ahora debe ser tamizada para evitar deslices o actos de protagonismo de los funcionarios.
Y es que desde oficios por escrito y hasta apercibimientos verbales girados desde las oficialías mayores o las direcciones de comunicación social se ha llamado a los funcionarios a canalizar las entrevistas a las dependencias ya citadas.
Lo curioso es que no se establece el porqué de este tipo de restricciones a los comunicadores sobre todo a aquellos que no se tragan las versiones oficiales y bueno habría que decirle a estas alcaldías que si hay algo que esconder pues lo digan y lo escondemos entre todo el pueblo.
Pero hay casos en los que por lo menos los funcionarios sueltan algo de información; no así en el caso de Pajacuarán cuya alcaldesa María Elena Macías, bautizada recientemente por el titular de Cedemun como La Reyna del Sur (por mi honor que no es broma ni sarcasmo); ahí hay que presentar el cuestionario por escrito en el que se establezcan las preguntas que se le van a hacer y después la Dirección de Comunicación fijará una fecha para la entrevista.
Así se las gastan en algunas alcaldías y no precisamente por órdenes de los alcaldes, a veces sí perno siempre, se trata más bien de funcionarios de medio nivel a los que la prohibición de hablar de sus logros en la administración pública los salva de tener que reconocer que no han logrado avances sustanciales.
Con recelo ha recibido la ciudadanía de Sahuayo el anuncio del operativo contra las motocicletas y es que, en honor a la verdad los argumentos dados por el alcalde de Sahuayo se ahogan por sí solos pues con este operativo no se solucionará nada en tanto la justicia, sobre todo en el tema administrativo, se ha tornado obsoleta.
¿Sabían ustedes que para presentar y ratificar cualquier tipo de denuncia tiene que viajar a Zamora? Es simple, si a usted le roban una motocicleta o lo asaltan o lo agreden en los distritos judiciales de Jiquilpan o Sahuayo, el agente del Ministerio Público en turno le toma la declaración pero le pide que viaje a Zamora (casi hora y media de carretera) para ratificar y para que lo atienda el sicólogo y así la verdad, con una justicia de este tipo nada más no se puede.
Lo lógico es que en este operativo se detecten muchas, muchas motos cuyos tripulantes no puedan acreditar la propiedad, lo malo es que si no existe una denuncia de robo, los policías no la pueden decomisar.
Es pues una justicia que se pone sola la zancadilla, los que sí estamos seguros que tendrán un excelente operativo son elementos policiacos bien identificados quienes previendo lo generoso de este tipo de operaciones ya cuentan con un recurso extra en los próximos días.