Secretos a voces
José Luis Ceja Guerra
Es un secreto a voces que el resultado de la elección de la tenencia de Totolán no era, ni con mucho, la que algunos funcionarios municipales de primer nivel querían.
Los desacuerdos que se dieron entre el Secretario del Ayuntamiento y la actual jefa de tenencia previos a la elección traspasaron los muros de las oficinas municipales y se tornaron en asunto público al grado de que, incluso, se pedía que el Secretario no asistiera a la tenencia a dar fe de esta elección como lo mandataba la Ley Orgánica Municipal.
Evidentemente el resultado fue un severo revés en las aspiraciones de quien se ha llamado como el candidato natural por el PRD a la alcaldía de Jiquilpan máxime que es justamente esta comunidad la que favoreció en mayor medida a Francisco Álvarez cuando buscaba el voto ciudadano.
A final de cuentas, la elección sienta un precedente importante en la vida política no solamente de esta comunidad sino que debiera ser ya incluida entre las posibilidades de ocurrir en cada uno de los Ayuntamientos de esta entidad pues aunque no lo pareciera son estos pequeños detalles, el poner claras las reglas del juego, los que podrían, en el futuro evitar mayores complicaciones e incluso enfrentamientos entre habitantes de una misma comunidad.
También es un secreto, que todos conocen, la intención de Alejandro Valencia, actual encargado de la política interna del municipio, de ser el próximo candidato a la alcaldía por el PRD sin embargo y visto el desencuentro con la recién electa jefa de tenencia de Totolán y habida cuenta de que esta comunidad es una bastión en las aspiraciones de la izquierda de este municipio, el panorama para el Secretario del Ayuntamiento no resulta halagador.
Tampoco es un secreto que el municipio de Sahuayo sufre una fractura en su cabildo que no se había visto en muchos años; los constantes reclamos de uno de los regidores del PRI, otro del PRD y el del PANAL sobre todo en el terreno mediático llenan de serias dudas al ciudadano pues éste se pregunta cuál es el trasfondo de esto, si es un asunto de oposición institucional o es un asunto que brinca más por el terreno personal.
Y es que de los dos regidores del PRI, solamente uno cuestiona y de los dos regidores del PRD solamente uno cuestiona, luego entonces uno llega a imaginar que las posturas de Jesús Ramírez del PRI y Jesús González Ayala del PRD y Jorge López Ávalos del PANAL son más cuestiones de carácter que de instituciones políticas.
Solamente los regidores saben hasta dónde quieren orillar al alcalde Francisco Sánchez y ellos, nadie más que ellos, saben por qué lo hacen, lo cierto es que estos pleitos y reclamos que también lograron brincar ponen en el ciudadano un dejo de temor sobre el estado que guarda la administración municipal.
En el caso del regidor del PANAL o Nueva Alianza el asunto se torna quizá un poco menos comprensible para la lógica, un tanto plana de los analistas locales, ya que el regidor llegó al cargo siendo parte de la planilla del candidato de Acción Nacional Francisco Sánchez aunque hay que entender las circunstancias de aquel momento que permitió a Nueva Alianza tener representación en cabildos como el de Jiquilpan y Sahuayo.
La lógica indicaría que en Sahuayo el regidor de Nueva Alianza fuera uno de los incondicionales del edil sin embargo y vistos los desencuentros todo parece indicar que a más de los regidores del PAN el presidente municipal puede apoyarse aún si es de manera coyuntural con el otro regidor del PRI y la regidora del PRD.