-Disminuye la prevención en unidades de primer nivel
-Temporada de calor incrementa enfermedades gastrointestinales y son pocas las personas que acuden a atenderse
Elena Rojas, Zamora
“Derivado de la desaparición del programa Prospera, hay más desidia entre la población para atenderse las enfermedades. Esto se percibe porque durante esta temporada de calor aumentan notablemente las enfermedades gastrointestinales, sin embargo al Centro de Salud ubicado en la calle Niños Héroes de esta ciudad solo acuden dos personas por semana, sobre todo aquellos casos que ya están complicados”, señaló Mario Alberto Méndez, director de ese centro.
Indicó que con dicho programa social los beneficiarios se les responsabilizaban a acudir a su unidad de primer nivel a las valoraciones continuas. Por lo que sin duda ha disminuido la prevención, a falta de este esquema”.
“Al desaparecer Prospera, disminuyó la prevención, la cantidad de consulta y el nivel de revisión continua, además producto de este programa se derivaban más, como atención a niños desnutridos. Por tanto, ya no tenemos con certeza de cuántos niños hay con este problema”, resaltó.
Dijo, “es importante que la gente con problemas diarreicos acudan a esta unidad porque se les hará un estudio epidemiológico, es decir se les hará una serie de preguntas y una toma denominada isopado, para ver el tipo de germen, ya sea viral o bacteriano parasitario para garantizarle el tratamiento más indicado”.
“Además, en algunos casos hacen el estudio en unidades particulares que no son avalados, ni raspados perianales para determinar el tipo de germen, por lo que tenemos esa pérdida de esos casos. No digo que no los hay, pero no acuden a su centro de salud”,
“En esta temporada no debemos bajar la guardia, ya que por las olas de calor, nos volvemos más susceptibles a las enfermedades gastrointestinales, llámese salmonela, proteus, brucela y brucelosis”, mencionó.
“De igual forma se corre un mayor riesgo de padecer el llamado “golpe de calor”, por el bajo consumo de líquido. Los más susceptibles son los niños, los adultos mayores y las personas con alguna enfermedad crónico- degenerativa”, sostuvo.
Al tiempo que la deshidratación, por el golpe de calor genera un alto riesgo de hiperglucemia, sobre todo en personas con diabetes tipo 2, agregó que actualmente la enfermedad gastrointestinal más frecuente es la diarrea del viajero, “es un germen denominado estatilococo aurius por el consumo de alimentos callejeros, que se venden en la vía pública, donde no tienen un buen aseo correcto de manos, cobran el dinero sin bolsa y a veces la comida está en descomposición”.
Subrayó que en temporada predomina el alto consumo de mariscos, “por las ondas de calor estos productos se descomponen fácilmente y eso genera la proliferación bacteriana”.
Finalmente recordó a la población que ante una enfermedad gastrointestinal debe evitar la automedicación, “estamos teniendo casos más frecuentes de resistencia a los antibióticos, tener aseo correcto de lavado de manos, aseo bucal, manejo higiénico de los alimentos, consumo de vitamina A y C y de abundantes líquidos”.
Numeraria
2 casos por semana acuden a atenderse alguna enfermedad diarreica