-Pudo haber sido mejor, pero gasolinazo impidió flujo de los recursos
-Bancos hicieron fuerte esa campaña por el sistema de financiamiento
Elena Rojas, Zamora
“Este año con respecto al anterior, sí incrementó la derrama económica hasta en un 40 por ciento durante la campaña “El Buen Fin”, pero el constante incremento en la gasolina fue un impedimento para que fluyan los recursos y pudiéramos tener mejores números”, afirmó Luis Fernando García Velázquez, secretario de la Cámara de Comercio (CANACO).
“La expectativa fue mejor con respecto al año pasado pues hubo más empresas participantes: este año se registraron a este programa de descuentos 100 negocios de las mil 300 empresas afiliadas a este organismo empresarial, solamente de Zamora”, apuntó.
Detalló que aunque fueron pocos los participantes, lo relevante es que en comparación con la primera edición del programa incremento el número de los mismos, aunque si bien dijo las grandes tiendas comerciales fueron el principal factor para desequilibrar un poco el interés en la participación.
“Son las grandes tiendas las que hacen mayor negocio que las pequeñas en este tipo de campañas, pero aun así yo vi el ánimo bueno, puesto que incluso hubo un 30 por ciento de incremento en los afiliados nuevos a la cámara, nada más para aprovechar ser partícipes del Buen Fin”, mencionó.
Subrayó que entre los giros más beneficiados fueron los dicados a la venta de ropa, calzado y los electrodomésticos, “los bancos apoyaron a muchas empresas y eso animó a los comerciantes que ofrecieron sus productos a 12, 18 y 24 meses sin intereses“.
Reveló que para algunos empresarios no les favoreció que haya caído en días inhábiles este programa, “definitivamente el costo operativo de las tiendas y los negocios que abrieron tuvieron que pagar salarios dobles o con prima dominical por haber sido días festivos, por esta situación muchos negocios optaron por no abrir, un 25 por ciento del total que participo en este programa”, destacó.
Puntualizó que días antes el comercio estaba muerto, pero que el Buen Fin fue la punta de lanza para que volviera la esperanza, aunque dijo debe ser realista, “la gasolina está pegándole duro al empresario. Yo se que la mayoría de los empresarios que participaron en el Buen Fin pidieron apoyos a sus distribuidores o a las fábricas para que les mandaran lotes de mercancía a consignación, con precios especiales para moverlas”.
Consideró que muy pocas empresas pudieron adelantar el aguinaldo a sus empleados, pues considero que solamente fue un 5 por ciento del total de las mismas, así lo hizo, para que los empleados pudieran aprovechar dichos descuentos, esto más bien fue con empleados federales, que aquí hay pocos”.
Numerara
3,500 empresas o negocios afiliadas a CANACO