Oscar De La Rosa, Zamora
La crisis económica ha ocasionado la desintegración y cambios radicales en quienes se dedican al mundo de la música debido a que es una profesión que ya no da ingresos para diferentes talentos locales entre mariachi, grupos versátiles, conjuntos norteños, rondallas, tríos o solistas.
El trabajo para los profesionales de la música ha caído de un 80 a 90 por ciento desde el inicio de la pandemia por COVID19, hace 9 meses. Los artistas han optado por dedicarse a otras actividades a partir de que ya no tienen ingresos y ha sido una causal importante por la que varias agrupaciones han tenido que separarse, de acuerdo a testimonios recabados por EL INDEPENDIENTE entre varios músicos.
“Quienes hacemos trabajo actualmente procuramos trabajar con las medidas de prevención respectivas, es decir, en lugares donde no haya mucha gente, con el uso de cubrebocas, gel antibacterial y evitar el contacto con la gente para no tener riesgo alguno y más cuando hay personas de la tercera edad que nos acompañan a los eventos en los grupos”, mencionaron.
Comentaron que la situación es más compleja cuando hay la cancelación de eventos sociales, principalmente, en fechas de fin de año donde las fiestas son limitadas, así como las actividades religiosas, como peregrinaciones en las que llegan a requerir de su participación para el acompañamiento en recorridos.
Finalmente agregaron que más del 70 por ciento de los músicos, mayores de 60 años, apenas ha sobrevivido con donaciones efectuadas por buenas personas y con la gestión de despensas que han hecho ante diferentes instancias, porque es una realidad que no hay condiciones para que se puedan dedicar a otra actividad debido a su estado físico.