-En detrimento de la actividad económica
-Hoy Día Mundial del Medio Ambiente
Elena Rojas, Zamora
“Cada vez el crecimiento de la ciudad va transformando el uso de suelo: de tierras de producción agrícola a suelos para uso urbano, es decir para levantar complejos inmobiliarios (casas-habitación y fraccionamientos). Lo cual va en detrimento de la actividad económica”, señaló Yanga Villalones Velázquez, profesor investigador del centro de estudios rurales en la línea de investigación sobre el medio ambiente del Colegio de Michoacán (COLMICH).
Agregó “desde la perspectiva de la vocación agrícola de la región; el hecho de que la ciudad vaya creciendo de una manera no regulada, un poco anárquica y sin planificación, va propiciando que el suelo agrícola vaya disminuyendo”.
Añadió que el uso de suelo agrícola también se ve afectado por la utilización de agroquímicos y de agua que no es de buena calidad, lo que va afectando la calidad del suelo.
“Propicia que la tierra se agote, deje de ser productiva, puede adquirir plagas, lo que hace que la actividad económica también disminuya. Por tanto un problema ambiental que tenemos en la región también tiene que ver con la calidad de suelo para uso agrícola, que se orientan hacia cultivos que satisfagan la necesidades de abasto de la población, con lo que se va trasformando la vocación de la tierra”.
Prosiguió “se va haciendo una agricultura mas tecnificada y de exportación, fundamentalmente con las berries. Esa actividad agrícola es intensiva porque se desarrolla todo el año, lo cual genera una presión sobre los recursos de agua y sobre la tierra porque se intensifica su productividad”.
Mencionó “el crecimiento de la ciudad ejerce una presión sobre las zonas de propiedad ejidal para que los ejidatarios vendan esas áreas que tenían una vocación agrícola se transformen en de uso habitacional”.
Indicó que de 10 años a la fecha se ha visto un crecimiento acelerado de la mancha urbana, con la construcción de complejos habitacionales “aquí en Zamora esta tendencia se ha visto principalmente hacia la parte norte, hacia la salida a La Piedad y Briseñas. Por allá se está extendiendo así como del libramiento hacia la zona militar. Ahí está el fraccionamiento Monte Olivo, luego están los que salen a la carretera del cementerio. Ahí debe haber tres; por el lado de la salida de Jacona a Jiquilpan dos. En estos últimos años han surgido entre 5 y 7 fraccionamientos nuevos”.
Recordó que es la autoridad municipal es la que autoriza los cambios de uso de suelo y da los permisos para las construcciones, “se mueven muchos intereses. El sector inmobiliario maneja mucho dinero: se compran propiedades, la tierra, materiales y se hacen desarrollos urbanos. La autoridad debe considerar que está priorizando si la actividad agrícola o el negocio”.
“Decirles que no autoricen cambios de uso de suelo porque eso afecta la actividad agrícola no me parece que sea un argumento que los va a convencer. Lo más pertinente es que la autoridad determine áreas en donde no habrá crecimiento urbano porque se les va a dar un uso de conservación, de una zona de captación de agua, por ejemplo, que tenga características importantes para la vida de la ciudad”, finalizó.
Numeraria
5 a 7 fraccionamientos se han construido en los últimos 10 años en Zamora y en municipios cercanos