-Patología se previene evitando grasas, harinas y carnes
Elena Rojas, Zamora
El crecimiento de la próstata es un proceso normal que experimenta el varón después de los 40 años; sin embargo, lo que no es normal es el crecimiento acelerado de esta glándula, padecimiento conocido como hiperplasia prostática. Esta al crecer, presiona la uretra y por tanto produce obstrucción urinaria. Por lo que el varón empieza a pujar para orinar, el chorro se adelgaza y se entrecorta y lo hace más delgado y además se presenta con más frecuencia a orinar por las noches (nicturia), señaló David García Hernández, urólogo y director médico de la clínica Instituto de Medicina Avanzada y Humanística (IMAH).
Añadió que los principales factores que favorecen el crecimiento acelerado de la próstata son hereditarios; así como una alimentación rica en grasas, harinas, aceites y carnes rojas. Otros factores menos importantes son infecciones recurrentes en vías urinarias y traumatismos. El crecimiento de la próstata se puede contrarrestar mediante un régimen favorable de alimentación y ejercicio; así como mediante chequeos, a partir de los 40 años, toda vez que al hombre le pueden recetar medicamento para frenar el crecimiento o este sea más lento.
Dijo que 4 de cada 10 varones mayores de 40 años tienen hiperplasia prostática; 5 de cada 10 varones mayores de 60 años y 7 de cada 10 de 70 años también ya tienen el padecimiento, “generalmente los adultos mayores de pueblitos que tienen una alimentación basada en legumbres, leguminosas y granos son los que menos problemas tienen y que por lo regular ya comienzan a dar síntomas del padecimiento después de los 90 años”.
Comentó, “hay varias técnicas para tratar la hiperplasia prostática. Cuando no requiera un procedimiento quirúrgico, se puede tratar con medicamentos como la tamsulosina de 0.4 miligramos diarios por la noche, durante 2 a 3 meses y finasterida de 5 miligramos”.
Mencionó que el tamaño normal de la próstata es de 20 a 30 centímetros cúbicos, “es decir, del tamaño de una nuez, pero me ha tocado operar próstatas gigantes, del tamaño de una jícama o de una naranja”.
Finalmente indicó que tras un procedimiento quirúrgico de próstata, se origina el tabú entre el varón que ya no tendrá una erección del pene, lo cual no es así, “lo único que es un hecho es que va a perder un poco o por completo la eyaculación, pero las erecciones se van a seguir teniendo. Pero si trata de pacientes jóvenes de 40 años que a veces no tienen familia, es muy importante para ellos la eyaculación. Por ello con más razón deben enfocar sus esfuerzos en la prevención”.