Oscar De La Rosa, Zamora
La pandemia del COVID 19 ha propiciado una parálisis en la industria de la construcción porque además de que la gente no tiene dinero para hacer obras, no existen garantías para evitar que haya una concentración de personas para hacer los trabajos requeridos y que se pueda frenar la cadena de contagio.
Roberto Palmerín García, presidente del colegio de arquitectos de occidente de Michoacán, dio a conocer que desde el año pasado es una situación que ha puesto en jaque al sector. Al menos una decena de arquitectos ha emigrado otros puntos de la república en búsqueda de mejores oportunidades.
“La salida de varios profesionales ha ocasionado que se tengan que perder empleos; estimamos que son al menos 500 vacantes que desaparecieron en un año y no sabemos en que va a acabar la situación con todas las afectaciones que representa y que lamentablemente incide en muchas familias”, dijo.
Mencionó que en Zamora no hay urbanización como en años pasados en donde se requería de mano de obra local para los trabajos y ello ha propiciado que muchas personas se tengan que dedicar a otras actividades para generar ingresos económicos que permitan sostener sus hogares.
Concluyó que es urgente apoyar al sector y no olvidar que también forma parte de una cadena productiva que genera economía y beneficios, porque al haber trabajo muchas familias ven mejorada su situación y no como ahora ocurre en el sector.