- El mandatario Salvador Jara entregó parte de los 434 certificados a artesanos, lo cual garantiza a compradores que están adquiriendo piezas de calidad.
- Tenemos que valorar más el tiempo que las personas dedican a su trabajo, no solo en la artesanía, sino en los oficios en general; destacó Jara Guerrero.
Tzurumútaro, mpio. de Pátzcuaro
Debemos hacer una alianza para no pelear, sino aprender a que todos ganemos poniendo el ejemplo con nuestros jóvenes, colaborar para que todos podamos vivir mejor porque Michoacán, como dijo el presidente Enrique Peña Nieto, tiene que ser una potencia a nivel nacional, convocó el gobernador Salvador Jara Guerrero.
En la plaza pública de esta tenencia, el gobernador entregó parte de las 434 certificaciones como artesanos tradicionales que el Instituto de Capacitación para el Trabajo del estado (Icatmi) y la Casa de las Artesanías (Casart) otorgan a igual número de personas con el objetivo de que su producción adquiera valor agregado en el mercado artesanal.
“La tarea de valorar artesanías y darle difusión es algo en que el gobierno debe actuar, pero todos debemos contribuir en que este trabajo no solo lo compre gente de fuera de Michoacán, sino que nosotros mismos prefiramos comprar algo de nuestros propios artesanos”, expresó.
El director del Instituto de Capacitación para el Trabajo del estado (Icatmi), Rodolfo Camacho Ceballos, resaltó que esta certificación es producto del esfuerzo conjunto con Casa de las Artesanías, ya que unieron recursos financieros, humanos y materiales para que los 434 artesanos recibieran su certificado como artesanos tradicionales.
Rafael Paz, director de Casa de las Artesanías, mencionó que este certificado entregado, representa un estímulo para los recipiendarios, porque dentro del proceso para conseguirlo, tuvieron que aprobar una serie de procesos establecidos por el Icatmi, lo cual también lleva a dar autenticidad en el mercado a los productos artesanales.
Jara Guerrero escuchó a los artesanos, al tiempo que conoció parte de su trabajo y la necesidad que tienen de contar con mayores espacios para la comercialización de sus piezas y que éstas se vendan al precio que realmente cuestan.