Oscar De La Rosa, Zamora
Sin la inyección de recursos económicos para proyectos de desarrollo y nula obra pública, solo se mantiene ocupado el 15 por ciento de las constructoras de la región, en donde sobrepasan las 20. El problema para muchos es que al no movilizar la maquinaria se desgasta y además no tienen la posibilidad de mantener fuentes de empleo ante la falta de ingresos.
Así lo dio a conocer Roberto Palmerín García, presidente del colegio de arquitectos del Occidente de Michoacán, quien comentó que la situación para el sector cada vez más es compleja y hay quienes incluso consideran la posibilidad de vender su patrimonio o exiliarse a otros lugares donde puedan encontrar mayores opciones de desarrollo.
Indicó que quienes se mantienen con trabajo es porque tienen la garantía de un particular para evitar que tengan alguna situación de falta de actividad, pero también se encuentran limitados los recursos porque no son grandes obras como en antaño que había proyectos de desarrollo como complejos comerciales o unidades habitacionales.
Comentó que muchos trabajadores que laboraban para las constructoras, como albañiles o supervisores de obra, han decidido buscar otro empleo para mantener a sus familias como es el caso de una congeladora o intentar otro oficio que les permita obtener lo necesario para dar calidad de vida a las familias.
Finalizó al decir que en el sector se han perdido varios millones de pesos de derrama que permitía garantizar una calidad de vida a por lo menos 2 mil familias distribuidas en el sector, pero ahora con las condiciones de crisis económica no se puede hacer más y por el contrario está en riesgo la actividad de las constructoras.