-Piden tomar en cuenta a la asamblea para separar a empleados
Elena Rojas, Zamora
“Fuera directivos”, “No más despidos de empleados calificados”, con estas consignas socios de la caja popular Santuario Guadalupano se plantaron ayer a las afueras de la matriz de esa institución, aun y cuando estaba lloviendo en ese momento, toda vez que están inconformes por una serie de medidas laborales que califican como arbitrariedades por las malas acciones que, dicen, están realizando representantes del consejo de administración y del consejo de vigilancia de esa sociedad de ahorro que pone en riesgo la estabilidad de los socios, según estimaron los quejosos.
Los ahí reunidos pidieron el cese de Lourdes Damián, presidenta del Consejo de vigilancia, Erika Sánchez Sánchez, presidenta del consejo de administración y de José Antonio Rodríguez Murillo, consejero, toda vez que argumentan que recientemente a través de la Federación Alianza, a la que pertenece la caja, de manera autoritaria despidieron al gerente general Héctor Escobedo Cisneros y están por hacerlo con el contador Leonardo Guillen, jefe de crédito, así como a otros empleados de primer nivel, siendo que la federación, según mencionaron, no tiene esas facultades, aun y cuando se lo hayan solicitado los Consejos.
“La Asamblea es la máxima autoridad, no se nos toma en cuenta para nada, los consejeros no tienen el mando autónomo, estamos en desacuerdo con las decisiones que han tomado, todo lo están haciendo a obscuras, estamos inconformes con su manera de actuar. Queremos cuentas claras, la gente que estaba sabe el manejo de esta caja, nos conoce, se adecuaba a nuestra situación, por ello exigimos que se convoque a una asamblea extraordinaria, ya que incluso muchos socios no están enterados de esta situación”, dijo una de las socias.
Otra argumentó “No es justo que gente ajena a la caja nos impida hacer movimientos que hacíamos sin ningún problema, sin darnos una explicación bajo el argumento de que son nuevos estatutos. No queremos entregar nuestra sociedad cooperativa a la federación, perdiendo la autonomía y aspecto social que la ha distinguido. La reestructuración de los préstamos se ha restringido, no podemos hacer reajustes, hay muchas trabas”, lamentó otro miembro.
Alberto Rodríguez Ibarra, quien es socio desde hace 14 años, dijo que además la federación extrajo información confidencial de los socios realizando actividades de auditoría que no le compete por ser solamente un órgano de integración y no de supervisión, “eso solamente lo puede hacer la Comisión Bancaria y de Valores”.
Detalló “anteriormente había mucha flexibilidad para los préstamos hacia los socios y ahora con estos cambios ya no, lo que ha propiciado que las reservas de la caja vayan disminuyendo porque están metiendo mano dura y no le están dando la confianza a los socios. De tener 3 mdp este año se han perdido 2 mdp según nos han dicho los mismos empleados de la caja, lo cual debe estar asentado en acta notarial”, finalizó.
Numeraria
15 años tiene la caja Santuario Guadalupano
14 mil socios tiene en este momento