Oscar De La Rosa, Zamora
Los comerciantes de la zona centro ya no aguantan más el cierre por el COVID-19 debido a que ya no tienen liquidez para costear los gastos de renta, pago de nómina y servicios para mantenerse en funciones, de esa forma ofrecer sus servicios o productos a los compradores que también se han ausentado en tiempos de la contingencia.
Las ventas han caído hasta 90 por ciento en lo que va de este mes y se mantenían con la esperanza de abrir para el 10 de mayo, lo cual finalmente no se concretó por la disposición sanitaria. El motivo del descenso en los ingresos se debe a que simplemente no hay compradores por dos factores que ellos consideran: el ahuyento de personas por la contingencia y la falta de recursos entre la población.
“Si no hay ventas la situación se pone difícil para nosotros porque no sólo es pagar por los gastos de operación, sino también el hecho de que todos nuestros productos se quedan y hay dificultades para que nos podamos deshacer de ello y en consecuencia son perdidas para nosotros porque es inversión que no se recupera”, dijeron comerciantes de la zona centro en un recorrido realizado por EL INDEPENDIENTE TV.
Otros aseguraron que la desesperación es un denominador común entre los comerciantes porque las rentas en los comercios del primer cuadro de la ciudad son exorbitantes, por encima de los 25 mil pesos. Ya no cuentan con los recursos para pagar por la ocupación del local y en consecuencia están a punto de desistir de su actividad.
Finalmente agregaron que después de un mes de aguantar ya no es posible que puedan soportar más tiempo sin obtener recursos como consecuencia de que deben cubrir adeudos; aseguraron estar dispuestos a cumplir con las disposiciones sanitarias de cierre, siempre y cuando reciban un auxilio más directo para evitar que se retiren de la actividad comercial.