“El valor de la solidaridad, la importancia de la sustentabilidad y la magia de sus sabores, sus mayores tesoros para no claudicar”.
Elena Rojas, Zamora
“La falta de apoyos económicos es la principal adversidad a la que se enfrentan las cocineras tradicionales. Les ponen muchas trabas para impulsarlas, toda vez que el sistema es demasiado burocrático y las trae a vuelta y vuelta. Y al final de cuentas les da un apoyo irrisorio o prácticamente nada”, lamentó Salvador Díaz Espinoza, chef tradicional.
Pese a ello, su tenacidad, el valor de la solidaridad mediante el trabajo comunitario, el poder de decidir y consensar, la importancia de la sustentabilidad por el amor con que cuidan el medio ambiente y valoran los productos agrícolas.
Así como la magia de sus sabores y el reconocimiento de sus saberes heredados por las abuelas y las madres han sido los mayores tesoros de las comunidades indígenas de los 11 pueblos (Chilchota) para que saquen adelante sus eventos gastronómicos que desde el 2006 llevan a cabo y no claudiquen ante la indiferencia de los gobiernos.
Lo anterior trascendió durante una rueda de prensa celebrada en “El Hotel” , encabezada por el chef; la Nana Adelaida Huerta Solís y la escritora extranjera Linda Bello Ruiz, quienes dieron a conocer el evento denominado “Memorias de las Nanas; K`eriiticha, U´kuaririicha, Ayudanza y Aprendizaje”, organizado por la A.C Mamaru Ambe Uricha.
Este se llevó a cabo desde ayer y hoy en el Cerro Kuririo de Santo Tomas en la Cañada de los 11 pueblos, Chilchota. Contemplo un ritual de los 4 elementos; un reconocimiento a las cocineras por el dia internacional de la mujer; un marco teórico de la cocina. También se contempla una degustación de Atapakua vs Bechamel (crema x); la presentación del libro “Tata Chef y sus Nanas”.
Asimismo se ofreció una comida de varios guisados purépechas y se realizó la visita a una panadería tradicional. Hoy sábado 9 de Marzo contempla el ingreso a un temazcal, un taller de atole prehispánico y tamales de una cocinera de Ocumicho, la participación de una orquesta, un cuadro folclórico de la casa de cultura de Chilchota.
Así como una danza del Corpus por las cocineras tradicionales; una danza de los viejitos; entre otras actividades.
Díaz Espinoza añadió que otra adversidad que enfrentan las cocineras es la invasión de la tecnología y la cocina moderna, “muchas de ellas han estado frustradas y cuentan como las nuevas generaciones (sus hijos) ya no quieren comer lo que ellas hacen”.
“La inter-culturalización ha invadido, está recobrando fuerza gracias al internet, lo cual es un benéfico. No obstante, una persona de esa edad, que no maneja el celular, que no tiene acceso a la tecnología, los hijos que si lo tienen, de alguna forma se crea una gran brecha, un gran distanciamiento”.
“Nuestra cocina tradicional es tan bella, tan saludable y llena de magia porque ellas lo entregan todo en la elaboración de sus platillos prehispánicos, ponen el corazón en el proceso”.
“El entorno nos lo da todo: la madre tierra, el aire, el agua. Por tanto debemos cuidarlo y ser más congruentes con la naturaleza, conservar nuestras tradiciones y ensalzar nuestra gastronomía purépecha michoacana”, finalizó
Numeraria
25 cocineras tradicionales participan en el evento
350 pesos costo del libro