Oscar De La Rosa, Zamora
Decreció la actividad de comensales en el sector restaurantero por la falta de recursos económicos entre la población. La pandemia del COVID-19 no ha terminado y por lo tanto sigue causando estragos en los establecimientos en los que mantienen en funciones medidas de prevención para evitar contagios entre la población.
Jorge Armando Su Su, presidente de la asociación de bares y restaurantes, informó que las ventas cayeron 30 por ciento, pero lo más lamentable es que no se vislumbra una tendencia de recuperación ni aun cuando se acerca la festividad del 10 de mayo, en donde todos los negocios de ese tipo pueden tener al tope la demanda.
“No se puede hacer mucho cuando los negocios operan con restricciones para el cupo y se requiere que, así como ocurrió en otros giros, se nos dé la posibilidad de operar con libre acción para que realmente haya una recuperación económica”, puntualizó.
Mencionó que hasta el momento no existe acercamiento de verdaderos apoyos para la capacitación del sector, como ocurrió en otras administraciones en donde se daba al menos adiestramiento para que mejoren sus servicios de atención, calidad y obtener distintivos para acrecentar garantías a los clientes.
“En ese sentido nos hemos quedado relegados y también influye para que se merme la confianza en los establecimientos en donde tenemos la intención de mejorar de manera gradual con el propósito de mantener la calidad en el servicio de lo que ofrecemos a los comensales”, finalizó.