-Inmadurez y falta de responsabilidad entre contrayentes, principales causales
-Hay 200 en lista de espera y adicionalmente 80 están en proceso
Elena Rojas, Zamora
En los últimos años se incrementó hasta un 50% las solicitudes de declaraciones de nulidad del matrimonio ante la iglesia católica; en Zamora existe un registro de 200 parejas en lista de espera y 80 en proceso, informó Miguel Espinoza del Rio, vicario judicial de la Diócesis de Zamora.
Aseguró que un 60% del total de las solicitudes son demandadas por los varones y solo en el 40% de los casos por las mujeres. La mayoría de los demandantes se trata de parejas jóvenes, “las principales causales para solicitar la nulidad son por inmadurez de los contrayentes”.
Igualmente, sostuvo, la falta de responsabilidad al incumplir con sus obligaciones esenciales conocido en el ambiente eclesiástico como “un grave defecto de discreción de juicio”, por falta de reciprocidad entre ambos en los derechos y deberes, por influir los padres de cualquiera de las partes en las decisiones que deben tomar como pareja y presiones para casarse sin estar de acuerdo”.
Añadió que, de acuerdo con el Código de derecho canónico, otra de las causales por las que se puede dar la nulidad del matrimonio es la incapacidad para asumir las obligaciones esenciales, “ya sea porque la pareja es drogadicta o alcohólica, o porque se tenga alguna enfermedad psíquica por la cual no puedan asumir las obligaciones esenciales, por la carencia de suficiente uso de razón.
O bien, puntualizó, puede haber casos de impedimento del matrimonio, “como puede ser la edad, ya que de acuerdo con ley eclesiástica del citado código no pueden contraer matrimonio válido los varones antes de los 16 años y las mujeres antes de los 14 años”.
Sin embargo, argumentó, “los Obispos en México establecieron que para que un matrimonio sea licito el varón debe tener 16 años o más y la mujer 18 o más. El interesado en realizar este proceso debe presentar un escrito en donde especifique el porqué de su decisión, el cual se manda a un “sacerdote defensor del vínculo”.
Dicho sacerdote analiza que todo se realice conforme a la ley de la iglesia, cuando este da su parecer se instituye un tribunal colegiado conformado por 3 sacerdotes, quienes se encargan de estudiar el caso, “la sentencia tarda en resolverse alrededor de 4 meses, la mayoría de las sentencias son a favor de los solicitantes, es decir, estos logran su objetivo de anular su relación”, finalizó.