-El resto les gusta el alcohol y la vida alegre
-Cada vez se inician a edades más tempranas ante la falta de empleos bien remunerados
Elena Rojas, Zamora
“Ocho de cada 10 mujeres que trabajan por la noche en los denominados “tables dance” lo hacen por necesidad económica, dado que de ellas dependen hijos, papás, hermanos o inclusive el propio marido. El 20 por ciento restante lo hacen porque les gusta el vicio del alcohol y la vida alegre”, señaló “Daysi” (nombre artístico), bailarina exótica quien desde hace tres años se ha dedicado al oficio del “tubo, tubo”, en diversos centros nocturnos del Distrito Federal, Hidalgo y Michoacán. Actualmente trabaja en conocido bar ubicado en la calle Leonardo Castellanos de esta ciudad.
Relató “lamentablemente me tocó un marido que no se reportaba con el gasto, descuidó a nuestra hija y a mí, por lo que me separé de él y tuve que recurrir a esta forma de vida. Al principio me dediqué a este oficio por necesidad, deseaba tener estabilidad económica, pero después le agarré el sentido a este trabajo y ahora no solamente lo hago para sacar adelante a mi hija, sino por gusto”.
En este sentido añadió “el 80 de estas mujeres vienen arrastrando una problemática difícil de vida, algunas de violencia intrafamiliar, otras de maridos irresponsables o incluso algunas fueron obligadas por sus propios esposos baquetones, pero que una vez que obtuvieron estabilidad económica los mandaron a volar”.
Y es que reiteró que la mayoría de mujeres que se dedican a esto “las ha movido el hecho de que no hay oportunidades de empleo bien remuneradas. Mientras un empleado de cualquier empresa gana un promedio de mil pesos a la semana, nosotros lo ganamos en una sola noche, hasta más. Hay representantes que es lo único que nos dan de sueldo, pero nosotros podemos sacar más, según el número de fichas que nos demanden los clientes. Entonces es la forma en que le empezamos a agarrar el sentido a eso, porque vemos que podemos tener mayores ingresos que en una empresa cualquiera”.
Indicó que en la entidad es cada vez más temprana la edad en que comienzan el oficio, dado que actualmente se pueden encontrar chicas de 17 años bailando al desnudo. No obstante, en el resto de los estados la mayoría de las mujeres que se dedican al conocido como oficio más antiguo del mundo es de 19 a 50 años, “por ejemplo en el estado de México necesariamente tenían que ser mayores de 18 años para poder entrarle a esta labor y no sobrepasar los 38 años”.
Comentó que se estima que cada año incrementa un 20 por ciento el número de mujeres jóvenes que se inician en este ambiente, “esto se debe a la difícil situación económica que se vive en nuestro país. Es la principal causa por la que una mujer se va a convertir en bailarina exótica, delincuente, o lo que sea, siempre va por delante el dinero y la necesidad”.
Dijo que los jueves, viernes y sábados son los más concurridos en los bares, dado que hay una mayor clientela, no obstante también “hay lunes muy buenos”, “todo depende de muchos factores, por ejemplo, cuando se escuchan muchas noticias de violencia organizada la gente se asusta y esto propicia que en ocasiones estos lugares estén desangelados, pero afortunadamente eso es muy raro, porque tenemos gran demanda de clientes”, finalizó.
Numeraria
8 de la noche a 5 de la mañana horario en que laboran
30 de Julio día mundial contra la trata de personas