-Ya son mil hectáreas de ese producto, de 7 mil que son utilizada para vida agrícola
-Piden a autoridades ambientales poner un verdadero freno a las acciones
-Tierra se erosiona y será perjudicial para recarga de mantos acuíferos
Oscar De La Rosa, Zamora
El crecimiento del cultivo de aguacate en las zonas boscosas de la región preocupa a los agricultores, porque habrá problemas importantes para el medio ambiente. En la actualidad son mil hectáreas de ese producto las que se trabajan en la zona de la Meseta Purépecha que pueden propiciar una erosión importante de la superficie cultivable.
“Es una situación que perjudica. El daño ya está hecho en esas hectáreas y no se puede revertir, pero sí se debe poner un verdadero freno por parte de las autoridades ambientales competentes y más ahora que existe una ley con la que se sanciona a quienes propicien un cambio de uso de suelo en zonas boscosas para acciones de ese tipo”, puntualizó Jorge Hernández Álvarez, presidente de la asociación de pequeños productores de papa de Huarachanillo.
Comentó que el riesgo más importante es la erosión de la tierra, por el cultivo de aguacate, debido a que complica la recarga de mantos acuíferos y por lo tanto habrá perjuicios para otras variedades que se generan en el campo, ya que no habrá el líquido suficiente para el riego.
“La población puede ser perjudicada indirectamente, porque a raíz de la escasez de agua existe el riesgo de que puedan tener problemas de secas y también se puede resentir un incremento en la temperatura ambiente. Además con la destrucción de zonas boscosas, se pierde flora y fauna y no hay una mejora en el equilibrio ambiental”, explicó.
Mencionó que a estas alturas también sería complejo solicitar a los agricultores que cesen de continuar con esa actividad porque está comprobado que la producción de aguacate genera dividendos importantes para su economía; por consecuencia, se tiene que trabajar por parte de las autoridades ambientales para que no se generen más daños en el ecosistema.
“Exigimos que las leyes se apliquen a quienes atenten contra nuestros bosques porque no se puede actuar de manera irresponsable. La problemática en esta región es menor en comparación con otros puntos de Michoacán; sin embargo, tenemos un problema de que las mil hectáreas ya representan el 15 por ciento de la superficie cultivable de esta zona”, enfatizó.
Concluyó al decir que los puntos más afectados por el cultivo de aguacate son Sirío, rumbo a Tinguindín y Patamban, que son ricos en bosque y no merecen ser más afectados por la mano del hombre que tiene su interés en generar recursos en materia económica.
Numeraria
-15 por ciento de superficie cultivable es de aguacate en Meseta Purépecha