Actualmente mayoría de quienes laboran en campo, son mujeres
Elena Rojas, Zamora.
Debido a las facilidades que están otorgando diversas empresas de Canadá y en algunos estados de Estados Unidos para contratar mano de obra mexicana, especialmente michoacana, con todas las garantías, seguros y prestaciones, se agudizó el fenómeno de la migración de jornaleros.
Por lo que ya prácticamente el campo michoacano se está quedando con mano de obra femenina. Pues en este momento el 70 por ciento de quienes laboran en el agro, sobre todo en la producción de frutillas en este valle de Zamora, son mujeres.
Así lo expresó Arturo Hernández Álvarez, representante del sistema producto papa en el estado de Michoacán, añadió que lamentablemente muchas de las veces las mujeres no tienen donde dejar a sus hijos.
“Esta situación se torna complicada, pues a veces se los llevan a trabajar y se exponen a riesgos: picadura de animales, etcétera. Es por ello por lo que urge en la región la creación de estancias infantiles para que tengan espacios seguros para dejar a sus pequeños, mientras ellas salen a buscar el sustento diario”, destacó.
Agregó que la mano de obra femenina tiene muchas cualidades, “son más responsables, no se van de parranda, son más trabajadoras y además saben trabajar mejor la frutilla, ya que son más cuidadosas al manejar, no la mallugan, contrario a los varones que son más rudos y no tienen el suficiente cuidado al momento de agarrar la frutilla”.
Cabe señalar que por cada hectárea de berries se generan 1 mil 300 jornales.
Finalmente añadió que en los últimos dos años han batallado para conseguir gente que labore en el agro. Por lo que ya muchas empresas de berries están contratando personal de otras comunidades más alejadas.