-No hay eventos sociales y además insumos andan por las nubes
Elena Rojas, Zamora
“Hacer pasteles para la venta, ya no es redituable, un presupuesto para la elaboración de un buen pastel ronda casi los 500 pesos y la gente lo máximo que quiere pagar ronda los 200 a 300 pesos, por lo que prácticamente no hay ganancia, además en la mano de obra se invierte mucho tiempo y esfuerzo y por si fuera poco el uso del gas y la luz han aumentado. Además los insumos andan exageradamente elevados y para acabarla de amolar por la pandemia no hay eventos sociales”, lamentó Concepción Zaragoza Vega, presidenta de la Camara Nacional de la Industria Panificadora (CANAINPA) de Zamora y la región.
“Prácticamente ya un pastel representa más que un alimento, un antojo y mucha gente no puede darse esos lujos, ya que perciben el salario mínimo, el cual es una burla para la clase trabajadora, está a 123 pesos con 50 centavos, por lo que prácticamente ante tanto aumento no alcanza para nada”, mencionó.
Actualmente los precios de los insumos son los siguientes: bulto de azúcar 970 pesos; la harina 450; grasas 630 y el huevo (27 pesos el kilo), “los aumentos son exagerados, un ejemplo claro es que a principios de año el bulto de azúcar costaba 765 pesos. Por eso en mí caso, desde hace dos años mejor ya no vendo pasteles y solamente ofrezco pan”.
Aunque se sinceró y dijo que vender pan es complicado, por lo que si hablamos de vender pasteles ya resulta más crítico, “anteriormente a estas fechas previo al día del padre tenía pedidos de 5 a 10 pasteles, pero ahora nadie ha solicitado ninguno.
Además, concluyó, ya hay mucha competencia en Zamora, tanto con las grandes tiendas comerciales como con pequeños particulares, ya todo mundo cree que sabe hacer pasteles, “aunque claro no a todos les sale bien, ni tienen la creatividad para hacerlos con calidad”.