-Emiten orientaciones pastorales para Semana Santa a celebrarse desde casa
Elena Rojas, Zamora
“Celebrar el misterio Pascual, centro y fundamento de nuestra fe, en medio del sabor a Calvario que estamos viviendo, a causa del COVID-19, es celebrar nuestra fe en el Dios que vence a la muerte con su Resurrección”, expresó en un comunicado Javier Navarro Rodríguez, Obispo de Zamora. Al tiempo que teniendo en cuenta las indicaciones de las autoridades respecto a la restricción de reuniones y movilidad de personas y las recomendaciones de la congregación del culto divino, dio orientaciones pastorales para la Semana Santa.
Dejo en claro que los ritos de Semana Santa se celebrarán sin la presencia del pueblo, únicamente con las personas necesarias para el servicio litúrgico; los fieles deberán ser avisados de la hora de inicio de las celebraciones para que se unan en oración desde sus casas con su familia, donde sea posible se trasmitan en directo. Durante esos días de semana Santa se recomiendan algunos signos para la comunión: El domingo de Ramos (entrada del Señor a Jerusalén) se invita a las familias a colocar en la puerta de sus hogares una palma o ramo para que esos hogares alcancen la bendición.
El jueves Santo los sacerdotes celebrarán la misa de “la cena del señor” en la parroquia o en alguna capilla, se omitirá el lavatorio de pies. Ese dia se podrá ofrecer la comunión a los fieles (en un horario amplio, cada media hora), con las debidas precauciones. Al momento del replique de campanas, las familias podrán tocar alguna campanita que tengan en su hogar; el viernes santo que se celebra la pasión del señor en una oración universal, se invita a las familias a preparar un pequeño altar donde se coloque un crucifico y se enciendan dos veladoras, a partir del momento que se celebre el oficio litúrgico. El rezo del viacrucis será trasmitido a los fieles, quienes pueden rezarlo también en casa. Se recomienda no hacer procesiones, estas podrían ser trasladadas a otros días más convenientes.
Durante la noche de vigilia Pascual los sacerdotes no administraran bautismos. Los fieles deben procurar unirse a la celebración en oración, deberán encender en la entrada de su casa un cirio que alcanzará la bendición y pueden sonar campanitas desde sus hogares y preparar un recipiente con agua que será bendecida a la hora de la liturgia bautismal que deberá rociarse a los miembros de la familia. El domingo de Resurrección se invita a celebrarlo en familia, haciendo en casa una bendición antes de los alimentos, colocando un cirio y un ramo de flores, que después será colocado en la puerta de la casa como un signo de esperanza. Finalmente aconsejó a los fieles: “en esa Pascua renovemos nuestra fe, en la Resurrección de Cristo, que es la verdadera esperanza del mundo”.