-Policías de Zamora son los más señalados
-Capacitan a elementos de la región sobre “el uso legítimo de la fuerza y la erradicación de la tortura”
Elena Rojas, Jacona
En lo que va de este año se han presentado 360 quejas ante la visitaduría de la región Zamora de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH), de las cuales 180 tienen que ver con el uso desproporcionado del uso de la fuerza, detenciones ilegales, violación de domicilio, e inclusive con torturas o tratos crueles e inhumanos y degradantes”, señaló Víctor Villanueva Hernández, visitador de la CEDH en Zamora.
Por ello, dijo, es importante concientizar y capacitar a los cuerpos policiacos para evitar que se vulneren los derechos de los ciudadanos y ellos a su vez resguarden su seguridad.
Lo anterior en el marco de una jornada de capacitación a elementos de seguridad pública denominada “el uso legítimo de la fuerza y la erradicación de la tortura” que se llevó a cabo los días 13 y 14 de Diciembre en UNIVA, campus Jacona.
En el adiestramiento se impactó a un total de 85 elementos de los municipios de Zamora, Jacona, Tangancícuaro, Santiago Tangamandapio, Coeneo, Ecuandureo e Ixtlán, “el próximo año seguiremos impactando a más policías. No queremos que ningún elemento, tanto de seguridad pública como de transito quede sin recibir estas capacitaciones”.
Es por ello que la CEDH implementó en todo el estado este programa de capacitación. Al tiempo que añadió que Zamora es el municipio con mayor número de quejas hacia los cuerpos policiacos, por ser la ciudad con mayor cantidad poblacional y por ubicarse la visitaduria en este municipio, “posteriormente le siguen Jacona, La Piedad, Sahuayo y Jiquilpan”.
“Necesitamos generar mejores condiciones para los elementos para que estos a su vez puedan prestar un mejor servicio a los ciudadanos, ya que una de las principales demandas más sentidas de la población es la seguridad”, mencionó.
Exhortó a los elementos policiacos a conducirse con responsabilidad, que asuman su labor como lo que son: elementos que deben garantizar la seguridad, la paz, la tranquilidad de la ciudadanía. Su labor es sumamente importante, difícilmente una autoridad municipal puede salir bien librada de su administración si no tiene un cuerpo de seguridad pública que verdaderamente garantice el respeto a los derechos humanos y que hagan su función con apego a la legalidad”, concluyó.