José Guerra/Tarecuato, Tangamandapio.
Derivado de la tala clandestina con fines de venta de maderas y del derribo de pineras para sustituirlas por plantaciones de aguacate, hasta el año pasado se habían deforestado cerca de 800 hectáreas del Cerro de la Chuparrosa de acuerdo al jefe de la tenencia de Tarecuato quien señaló que deberán proponerse alternativas para la explotación sustentable de este bosque.
De acuerdo a Florencio Sebastián Mateo, jefe de esta tenencia el problema es que bajo el argumento de que son dueños de su propiedad, algunos comuneros han cedido los predios que poseen en el bosque a terceros para que se derriben pineras y se implanten cultivos de aguacate.
El problema, señaló, es que esta rotación de cultivos no permite que se acumule en el subsuelo la cantidad de agua normal ya que aseguró que la planta de aguacate carece de capacidad de retención de agua y el principal indicador de esto es que, desde hace cerca de 7 años que se comenzó a hacer la medición del manantial que abastece a esta comuna, se ha notado una merma en la capacidad de recuperación a razón de cerca de 10 centímetros por año.
Señaló que incluso se han generado incendios de manera intencional para poder argumentar el cambio de cultivo y a esto se suma la actividad constante de taladores clandestinos muchos de los cuales han sido detenidos por los mismos comuneros y presentados ante las autoridades correspondientes sin embargo, dijo, nunca han sido castigados pues a las pocas semanas son detenidos de nueva cuenta.
Señaló que como integrante del Consejo Consultivo Nacional de los Pueblos Indígenas, en representación de la Nación Purépecha ha solicitado que el gobierno federal pueda generar las alternativas necesarias para explotar los bosques sin que esto implique necesariamente el derribo de los árboles.
Ejemplificó que mientras para la plantación de aguacate es necesario derribar árboles, para la plantación de café no ya que las plantas pueden crecer y desarrollarse sin problemas a la sombra de los pinos.
Señaló que a nivel general se tiene la meta de sembrar 700 mil árboles en diversas regiones de la entidad.
Preocupa a autoridades indígenas deforestación de sus bosques.
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