-Productores mantienen arraigada la cultura de la siembra tradicional
Elena Rojas, Zamora
Comparado con las 3 toneladas por hectárea de rendimiento promedio nacional de maíz, ya que en esta región Lerma Chapala se tienen rendimientos de hasta 5 toneladas por hectárea, la producción no es negocio para los agricultores, debido a los altos costos de producción, aunado a que mantienen arraigada la cultura de la siembra tradicional, señaló Saúl Luviano Montalvo, delegado de la Secretaría de Desarrollo Rural y Agroalimentario (SEDRUA).
Detalló que los costos de producción son elevados, “producir una hectárea de maíz implica un gasto de 12 mil a 15 mil pesos, desde el costo del agua, abono, fertilizante, trabajo, semilla, e inclusive algunos tienen que pagar la renta de la tierra, etc. Mientras que una tonelada de maíz la vende el productor a 3 mil pesos, por lo que al sacar rendimientos bajos el productor sale perdiendo o bien, la ganancia es mínima”.
“Por lo que a pesar de ser el maíz el alimento básico de los mexicanos, no es el que mejor ganancia le deja al productor. Hoy en día mucho productor siembra para darle de comer a sus animales o para autoconsumo, pero no como negocio”, subrayó.
Explicó, “para que la cosecha del maíz sea redituable, se requieren obtener por lo menos 10 toneladas por hectárea, sin embargo los productores no lo logran estos rendimientos debido a que se empeñan en sembrar de la forma tradicional; asimismo utilizan semilla no mejorada con la que se obtienen rendimientos bajos, su forma de fertilizar no es la adecuada, no le hacen estudios al suelo para saber qué abono ocupa la tierra”.
Añadió, “no aprovechan toda la superficie, debido a que siembran a mano y no utilizan implementos como puede ser una sembradora e precisión para aprovechar toda la superficie y obtener mayores rendimientos. Por ello es importante apostar a la mecanización del campo”.
Recalcó, “los rendimientos bajos que se tienen en el campo obedecen a una cuestión cultural. Nosotros debemos enseñar al productor a que debe pensar como empresario. Los freseros ya lo están haciendo, ellos buscan la manera de tecnificar su campo, de implementar nuevas tecnologías que vienen a incrementar la producción, pero nos falta en el maíz buscar nuevas tecnologías”.
Agregó, “por ejemplo el fideicomiso instituido en relación con la agricultura (FIRA) tienen unas parcelas demostrativas en Guanajuato donde tienen 17 toneladas por hectárea, implementando nuevas tecnologías, ahí siembran el maíz con acolchado y el riego es por goteo, por ello obtienen mayores rendimientos”.
Puntualizó, “también deben apostar a la agricultura por contrato, esquema con el que se asegura un precio justo en el mercado. Con este programa el productor ya sabe cuánto va a ganar, con la posibilidad de que si el precio estuviera por encima al precio pactado de contrato, le van a pagar la diferencia, y si el precio estuviera por debajo del precio pactado, al productor le van a mantener el precio pactado. Además de que sabiendo cuánto va a ganar el productor puede llevar una mejor administración”.
Finalmente recordó que en 2015 se cultivó una superficie de 74 mil 315 hectáreas de maíz en la totalidad de los 17 municipios que conforman esta región, con lo que se tuvo un rendimiento de 450 mil 112 toneladas. Este 2016 incrementó la superficie del maíz hasta en un 100 por ciento, respecto al año anterior, ya que los productores de sorgo por el temor al pulgón amarillo, mejor optaron por sembrar maíz, aun y cuando este no es muy redituable.
Numeraria
17 municipios abarca la región Lerma- Chapala