Guillermo Ríos, Zamora
Los pupilos de José Luis Linares Méndez, “El Poli”, confirmaron una vez más su gran momento y contundencia, así también aumentaron el trecho de ventaja que le lleva a su siguiente en la tabla general, con lo que ratificaron el título que semanas atrás habían festejado matemáticamente.
Ahora tenían enfrente a un duro rival, Deportivo Palo Alto, caracterizado por jamás bajar los brazos y nunca dejar de luchar en un encuentro de futbol, aunque matemáticamente el equipo Hueso ya es campeón, no dejaba de parecer interesante el juego.
El duelo se llevó a cabo sobre la grama del campo A de la Unidad Deportiva El Chamizal, bajo la encomienda del silbante Javier Ortega García del colegio “Arturo Brizio Carter” quien siempre se mantuvo cercano a las jugadas y no permitió que el juego se saliera de control, luego de que el conjunto Palo Alto comenzara a disputar el balón de forma enérgica en medio campo.
Al inicio del encuentro ambas escuadras presentaban a sus mejores jugadores sobre el terreno del juego, el conjunto de Palo Alto más ofensivo y con la idea clara de llevarse el triunfo, mientras que el Deportivo Hueso más reservado, con la firme idea de darles oportunidad a todos sus jugadores que durante la campaña fueron constantes.
El juego comenzó muy dinámico, con Palo Alto desbocado, los pupilos de Mario Martínez se fueron con todo al ataque, aprovechando la velocidad de sus delanteros y profundidad de sus carrileros, pero las intervenciones del arquero del Hueso Alejandro Rangel, mantenían cero por cero el marcador.
Poco a poco el Hueso fue controlando las acciones del juego, a tal grado de no prestarle el balón a los de Palo Alto, fue entonces que Iván Cázares abrió el marcador, con un potente derechazo que cruzaba el gran lance de Marco Aviña, 1 por 0 el marcador a favor de los pupilos del “poli Linares”.
La respuesta fue inmediata, el conjunto de Palo Alto estaba jugando a matar o morir, Cesar Covarrubias, Miguel Cortez y Luis Peña se multiplicaban en el área del Hueso pero la pólvora parecía estar mojada por que nomás no hacían explotar la portería defendida por el guardameta Alejandro Rangel.
1 minuto antes de terminar el primer tiempo, una jugada desafortunada por parte del defensa del Hueso Adrián Arias, quien al intentar alejar el balón de su portería terminaba incrustándolo dentro de su propia cabaña, dejando para la segunda mitad la definición del juego.
De regreso al cotejo, el equipo Palo Alto saltó al terreno con la firme intención de proponer su ritmo y condiciones, por momentos cediendo la inactiva y por momentos tomando el control, por su parte el Deportivo Hueso se mantenía solido en la parte baja no permitiendo el pase de jugadas de peligro a su portería.
Cuando ya todo mundo estaba resignado a ver el encuentro terminar en empate, Adrián Arias del Hueso se sacaba la espina del error cometido en la primera parte y conectando el esférico de forma magistral lo enviaba al encuentro con las piolas, ante la mirada atónita de los del Palo Alto quien ya saboreaban un punto por lo menos.
4 minutos agregó el central y con ello se consumieron las esperanzas de los del Palo Alto quienes tuvieron oportunidades claras pero al momento de la definición no fueron contundentes y les tocó pagar los platos rotos frente del Hueso.