-Fundamental la figura del sacerdote, ante estos tiempos caóticos
-Este fin de semana en las 135 parroquias de la Diócesis hicieron jornada de oración
Elena Rojas, Jacona
Ocho de cada diez seminaristas desisten durante la formación para la vocación sacerdotal, así lo informó Rubén Falcón, seminarista de tercero de filosofía del Seminario Mayor Diocesano en este municipio.
Añadió “hoy en día hay mucha renuencia por parte de los jóvenes a acercarse a la Iglesia. Se ha perdido el interés al sacerdocio, incluso el sentido religioso. Los jóvenes lo ven más como un sacrificio, ya que conlleva no tener pareja. Los muchachos hoy optan por tener pareja, familia, hijos, prefieren desarrollarse en ese aspecto”.
Es por eso, dijo, que buscan promover la vocación del sacerdocio, “la cual también conlleva responsabilidades, respeto a la comunidad y participar de manera activa en los problemas que tiene la comunidad tanto a nivel educativo, cultural, etc., para ser un pastor”.
Lamentó “cada vez hemos tenido menos vocaciones, porque impera el consumismo u otros aspectos superficiales, además de que muchas veces se tiene como la figura del sacerdote muy vaga. Los jóvenes se dejan llevar por la apariencia, ven al sacerdote en una iglesia dando misa y con esa imagen se quedan, pero va más allá”.
Lo anterior lo expresó al informar que este fin de semana 60 seminaristas de instancia menor; 35 del curso introductorio y 90 del seminario mayor se distribuyeron en las 135 parroquias que conforman la Diócesis de Zamora para hacer una jornada de oración, a fin de que se generen esas vocaciones en los hogares, que es el primer semillero.
“La intención es despertar la consciencia de las personas, de la necesidad que hay de vocaciones. La realidad es que somos 1 millón 400 mil personas en el área de influencia de la Diócesis y únicamente hay 300 sacerdotes”, subrayó.
Señaló que es fundamental la figura del sacerdote, sobre todo en estos tiempos caóticos, de tal manera que durante dicha jornada dijo que se recordó a la gente la importancia de las vocaciones, “como dice el evangelio, mucho es trabajo y poca luz. Los futuros sacerdotes salen de la casa, así es donde se forman los verdaderos semilleros, ahí es donde se forman los valores”.
Por su parte, finalmente Noé Vázquez, seminarista, dijo “hace falta concientizar entre la ciudadanía el rol del sacerdote, quien se encarga de extender el mensaje de paz, de fortalecer los valores humanos y cristianos, para propiciar la fe, además de transmitir el mensaje de Dios; por lo que el reto que enfrentamos los seminaristas y sacerdotes ser un ejemplo a seguir en lo que respecta a la oración”.